lunes, 6 de noviembre de 2017

ATG CAP 955

Capítulo 955: “Crisis”.

Antes de que Ji Hanfeng hubiera terminado su oración, la formación profunda de repente brilló con una luz profunda. Una bola de luz blanca se separó de la formación profunda y lentamente cayó. Después de que tocó el suelo, la luz blanca desapareció, antes de emerger con la silueta de Yun Che.

Los otros practicantes profundos habían sido expulsados de la formación profunda o arrojados despiadadamente, con aspecto abatido y miserable. Sin embargo, Yun Che había sido enviado suavemente y aterrizado sin problemas.

Esto se debió a que los otros habían sido expulsados por la formación profunda después de “morir” y Yun Che había renunciado aún con vida.

Lo primero que Yun Che sintió fue que su cuerpo no parecía no haber sufrido ninguna herida o lesión. De hecho, no sentía que hubiera usado ninguna energía profunda en absoluto. Sin embargo, inmediatamente notó que la atmósfera circundante no parecía del todo bien y rápidamente abrió los ojos para inspeccionar el área.

Mu Xiaolan aún se mantenía a una distancia frente a él, pero su boca estaba abierta de par en par. Mu Sushan, que estaba a su lado, tenía una mirada extremadamente extraña en sus ojos. A su lado, un grupo de practicantes profundos estaba cuidadosamente organizados en ordenado con Ji Hanfeng de pie frente a ellos. Al mismo tiempo que vio a Ji Hanfeng, también vio de inmediato a Li Mingcheng, que estaba al frente del grupo.

Y entre estas personas, todos y cada uno de ellos estaban estupefactos, como si hubieran visto un fantasma a plena luz del día.

Yun Che no había sido expulsado del Reino Profundo de Hielo por haber “muerto”, así que su estado mental no estaba en desorden. Después de su instancia de ser aturdido, la situación circundante, la atmósfera, así como la expresión en las caras de todos inmediatamente le hicieron darse cuenta de que algo había sucedido.

Qué pasó…. ¿Hubo algún problema con el examen?

¡No debería haber! Entonces, lo único posible es…

¡Soy la última persona que salió!

¡¡Clang!!

Se produjeron ondas de energía profunda cuando un inmenso sonido resonó desde atrás. La luz de la formación profunda se retractó instantáneamente, y en solo un momento, toda la formación profunda desapareció. El espacio dentro del límite de la formación profunda estaba completamente vacío, sin un solo rastro de una figura humana.

El examen final del Salón de la Nieve Congelada realmente había terminado en este mismo instante.

¡Y el número uno de este examen final, en otras palabras, la última persona que dejó el Reino Profundo de Hielo, en realidad fue Yun Che!

Mirando a Yun Che, que apareció desde dentro de la luz blanca y la desaparición de la formación profunda, todas las personas presentes sintieron como si sus cerebros hubieran chocado. Incluso después de mirar por un largo rato, todavía no podían creer en sus propios ojos.

El resultado de Li Mingcheng fue extremadamente extraordinario. Si hubiera obtenido el primer lugar, nadie hubiera sentido que fuera inesperado. Sin embargo, la fuerza profunda de Yun Che estaba claramente en el Quinto Nivel del Reino Profundo Soberano. Dejando de lado entrar en el camino divino, incluso si estaba en el Reino Profundo Soberano, solo estaba en la etapa intermedia de la misma. Además, era incluso un practicante profundo que provenía de los Reinos Inferiores, y era mucho más débil que los practicantes profundos del Reino de Dios del mismo nivel. Con su fuerza profunda y nacimiento, olvídate del Salón de la Nieve Congelada, entrar al Palacio de las Nevadas sería extremadamente difícil también.

El poder participar en los exámenes del Salón de la Nieve Congelada, fue solo un “permiso especial” otorgado por la Maestra Principal del Salón como una forma de burla e incluso un poco vergüenza. El aceptar su propuesta fue solo una broma a los ojos de todos. ¡¡Y fue exactamente esta “broma”, quien en realidad había superado a Li Mingcheng en el examen final, y había superado a todos y cada uno de ellos!!

“Yun Che, T… T-T-T-Tu…” Mu Xiaolan no pudo mantener su mente tranquila de esta gran sensación de disparidad. “Tú eres… en realidad… el número uno… Ah…”

Yun Che miró a Mu Sushan. De la situación actual, ¿cómo podría dejar de entender que fue realmente engañado por este gerente general del Salón de la Nieve Congelada? Además, esa mirada bastante significativa llevada por Mu Sushan era claramente una gran confesión.

En el Reino Profundo de Hielo, había sospechado si “quince minutos” era un poco corto.
Pero nunca esperó que eso, en realidad fuera… ¡demasiado largo!

Parecía que Mu Sushan se había dado cuenta de los diferentes comportamientos de Yun Che y los resultados del examen del Reino Tormenta de Nieve, y así lo “engañó” un poco. Sin mencionar que se hizo sin dejar rastro. Incluso con la astucia de Yun Che, no pudo sentir nada extraño.
Como alguien que podría mantener un alto estatus incluso en el Reino de Dios, ¿cómo podría ser una persona común?

Sin embargo, mirando desde otra perspectiva, este resultado hizo que Yun Che se diera cuenta de que había subestimado seriamente su actual nivel de fuerza. Cuando entró por primera vez en el Reino Profundo Soberano, pudo matar a Xuanyuan Wentian, cuya fuerza profunda ya había alcanzado el nivel de los dioses. En el presente, su fuerza profunda había alcanzado la etapa intermedia del Reino Profundo Soberano. Lo más probable es que el nivel de fuerza de los practicantes profundos divinos con los que él podía enfrentarse cara a cara, ¡había superado con creces sus predicciones iníciales!

Al mirar las cosas ahora, parecía que ya no era posible para él mantenerse con bajo perfil, incluso si quiera.

“Haah”. Yun Che suspiró, mientras murmuraba para sí mismo en su mente. “Alguien como yo es como el sol que cuelga en un cielo nocturno. No importa cuánto esfuerzo se ponga, es imposible cubrir esta luz excesivamente brillante.”

Girando, Yun Che se enfrentó a la aturdida multitud y le habló a Ji Hanfeng. “Ahora, debería tener los requisitos para convertirme en un discípulo del Salón de la Nieve Congelada, ¿verdad?”

“No solo eso.” Antes de que Ji Hanfeng pudiera responder, Mu Sushan ya se estaba riendo mientras hablaba. “Fuiste la última persona que abandonó el Reino Profundo de Hielo, y sin lugar a dudas se ha convertido en el recién llegado más sobresaliente entre los discípulos. No solo tendrás los requisitos para convertirte en un discípulo oficial del Salón de la Nieve Congelada, sino que también recibirás una Píldora del Alma de Hielo del Jade Caído como recompensa. Con tu nivel de cultivo actual, si alguien te ayudara a refinar por completo esta Píldora del Alma de Hielo del Jade Caído, todo tu ser renacerá y experimentarás un crecimiento inmenso a partir de ese momento. Ho Ho Ho.”

“¡¡Espera un minuto!!”

Una voz ansiosa de repente sonó. Li Mingcheng salió del grupo, su rostro era solemne cuando exclamó en voz alta. “¡No puede recibir la Píldora del Alma de Hielo del Jade Caído! ¡Cualquiera podrá ver que el resultado de este examen es inusual! ¡Este pequeño llamado Yun Che… claramente ha hecho trampa!”

Bajo las instrucciones de Mu Fengshu, había retrasado su entrada en el Salón de la Nieve Congelada durante tantos años, con el fin de obtener la “Píldora del Alma de Hielo del Jade Caído” que se otorgaba especialmente en los exámenes de este año. Por hoy, había soportado durante muchos años y se había preparado durante muchos años. La “Píldora del Alma de Hielo del Jade Caído” ya estaba a su alcance, ¿cómo podía permitir que cayera en manos de otra persona…? Sin mencionar que fue otorgado a una basura que no conocía su lugar.

“¿Hice trampa? ¿Dónde está la evidencia?” Yun Che dijo impotente. Con la forma en que se había desarrollado la situación, ya no le era posible mantener la discreción. No tuvo más remedio que seguir con este resultado.

“¿Evidencia? ¡Heh!” Li Mingcheng rió fríamente mientras caminaba hacia Yun Che, un paso a la vez. “¿Hay incluso la necesidad de evidencia para esto? ¡Siempre y cuando sea alguien que no sea ciego, es fácil ver que definitivamente has hecho trampa! Todos y cada uno de los Lobos del Invierno Helado en el Reino Profundo de Hielo es una bestia profunda en el Primer Nivel del Reino del Origen Divino, y poseen habilidades ofensivas extremadamente poderosas. Incluso yo tuve que ser especialmente cuidadoso al tratar con ellos. Tú, sin embargo, eres solo una basura en la etapa intermedia del Reino Profundo Soberano, tu único resultado posible es que te maten instantáneamente frente al Lobo del Invierno Helado, así que ¿¡cómo puedes posiblemente permanecer en el Reino Profundo de Hielo por un período tan largo de tiempo!?”

“El hermano menor Mingcheng tiene razón.” Dijo Ji Hanfeng, con los ojos fijos en Yun Che. “Creo que no solo el hermano menor Mingcheng, cada persona aquí es incapaz de creer en este resultado. Yun Che, ¡tienes muchas agallas! El examen del Salón de la Nieve Congelada está diseñado para elegir excelentes discípulos para la Secta del Divino Fénix de Hielo. ¡Frente a tal majestad divina, te atreves a hacer trampa! No eres más que una humilde persona del Reino Inferior, ¿¡qué tipo de lugar piensas que es la Secta del Divino Fénix de Hielo!?”

“¡Ji Hanfeng!”

Yun Che estaba ligeramente enfurecido por el término “persona humilde del Reino Inferior”, ya que lo nombró bruscamente. “Antes del examen, dijiste una vez que todavía es posible aprobar el examen del Reino de la Tormenta de Nieve a través de trampas, pero es imposible que alguien haga trampa en el examen del Reino Profundo de Hielo. ¡Esto es lo que dijiste personalmente! En este momento, ¿sobre qué base sospechas de mí por hacer trampa?”

“¡Eso es cierto! ¿¡En base a qué!? ¡Ya que estás diciendo que Yun Che hizo trampa, muestra al menos algunas pruebas!” Mu Xiaolan salió corriendo y se paró al lado de Yun Che, como ella dijo un poco imponente. En realidad… en su mente, ella estaba muy nerviosa. Muy, muy nerviosa. Porque incluso ella estaba absolutamente segura de que… ¡Yun Che debió haber hecho trampa!
De lo contrario, con su nivel de fuerza profunda, ¿cómo es posible que pueda permanecer en el Reino Profundo de Hielo durante tanto tiempo?

Sin embargo, Yun Che fue traído por Mu Bingyun, por lo que no tuvo más remedio que tragarse su orgullo y ponerse de su parte. ¡Además, él no debe admitir ~~ que hizo trampa! Aunque no sabía qué método utilizó Yun Che, hacer trampa en el examen del Salón de la Nieve Congelada era un gran escándalo. Si fuera a cambiar la realidad, a ella no le preocupaban las consecuencias que tendría Yun Che, pero había una gran posibilidad de que afectara la reputación de Mu Bingyun. No importa qué, ella no podía permitir que tal cosa sucediera.

“Es absolutamente fácil determinar si Yun Che realmente ha hecho trampa”, dijo Li Mingcheng con confianza. “¡Durante el examen anterior, Yun Che se quedó en el Reino Profundo de Hielo durante exactamente quince minutos! Yo, Li Mingcheng, reconozco que soy incapaz de lograr tal hazaña, pero Yun Che realmente puede hacerlo. Entonces, si no hizo trampa, su fuerza definitivamente debe superar a la mía.”

Cuando se pronunciaron estas palabras, los practicantes profundos que los rodeaban rompieron en risas. Li Mingcheng estaba en el tercer nivel del Reino del Origen Divino, e incluso estaba en las últimas etapas. Añadiendo sus dones innatos, definitivamente era capaz de enfrentarse cara a cara con un oponente en el Cuarto Nivel del Reino del Origen Divino. En cuanto a Yun Che, él era alguien de los Reino Inferiores que ni siquiera había pisado el camino divino. Él era el chiste de este examen, y no tenía calificaciones para siquiera ser comparado con Li Mingcheng en absoluto. ¿Cómo podría ser más fuerte que Li Mingcheng?

“Entonces,” Li Mingcheng levantó su mano hacia Yun Che, su expresión llevaba deleite y desprecio. “Ya sea que haya hecho trampa o no, lo sabremos una vez que intercambiemos golpes. Yun Che, ya que dijiste que no hiciste trampa, entonces tengamos una ronda. Oh, no tienes que vencerme por completo, siempre y cuando seas capaz de resistir cinco de mis ataques, yo, Li Mingcheng, admitiré que no hiciste trampa. Sin embargo, si no puedes pasar cinco ataques de alguien cuyos resultados ni siquiera se pueden comparar con los tuyos… Heheheheh…”

“Hahahaha, ¡qué gran sugerencia la del hermano menor Mingcheng!” Ji Hanfeng se rió. La multitud circundante de practicantes profundos le dio a Yun Che miradas despreciables o engreídas. En sus corazones, todos ellos creían que Li Mingcheng realmente estaba pensando demasiado alto de él por proponer “cinco ataques”… O, simplemente, estaba tratando de jugar con él.

“Yun Che, ¿oíste eso?” Dijo Ji Hanfeng en un tono frío y dominante. “¡Si deseas demostrar que no hiciste trampa, intercambia golpes con Li Mingcheng para demostrar tu inocencia! Si realmente tienes las capacidades para permanecer en el Reino Profundo de Hielo durante tanto tiempo, lidiar con solo cinco golpes de Li Mingcheng debería ser pan comido, ¿verdad?”

“¡No!” Mu Xiaolan tiró de las mangas de Yun Che, y dijo con una mirada severa. “Yun Che fue exonerado del primer examen debido al permiso ‘especial’ de la Maestra Principal del Salón. Para los exámenes del Reino de la Tormenta de Nieve y el Reino Profundo de Hielo, Yun Che siguió los mismos procedimientos que el resto de los participantes e ingresó a las mismas formaciones profundas para los exámenes. Ustedes no tienen ninguna evidencia, y solo están arrojando sus propias suposiciones, ¿sobre qué bases están diciendo que hizo trampa? La razón por la cual Yun Che fue personalmente traído aquí por mi maestra, fue porque él poseía tal fuerza. Así que, ¿sobre qué base tiene que sufrir todas sus sospechas constantes?”

“Además, Ji Hanfeng, parecías haberlo olvidado.” Mu Xiaolan levantó la voz un poco. “Los exámenes del Salón de la Nieve Congelada se completan con las formaciones profundas. Eres solo un supervisor y no tienes los requisitos para intervenir en el proceso o los resultados de los exámenes. Los resultados de los exámenes ya están determinados en el instante después de la desaparición de las formaciones profundas. Básicamente no tienes los requisitos para que Yun Che demuestre que no hizo trampa.”

“…” Ji Hanfeng se quedó sin palabras por un momento, sin una palabra para refutar. Porque lo que Mu Xiaolan dijo fue exactamente correcto. Él era solo un supervisor y mensajero. Los resultados y el proceso de los exámenes fueron determinados y sometidos por las mismas formaciones profundas. Él, un simple discípulo del Salón de la Nieve Congelada, básicamente no tenía las calificaciones para intervenir.

Li Mingcheng se adelantó rápidamente y dijo en tono recto. “¡El asunto de las trampas de Yun Che ya no es solo un problema relacionado con los resultados de los exámenes, sino un problema relacionado con el Salón de la Nieve Congelada, e incluso la equidad y la reputación de toda la Secta del Divino Fénix de Hielo! Si…”

“¡Hmph! Lo estás haciendo sonar tan extravagante, pero en verdad, ¿no es todo solo por la Pildora del Alma de Hielo del Jade Caído?” La simple frase de Mu Xiaolan había atravesado instantáneamente los pensamientos de Li Mingcheng, y ella insistió. “Ji Hanfeng, el examen ha terminado hace tanto tiempo, ¿por qué aún no has anunciado los resultados, y entregado la Píldora del Alma de Hielo del Jade Caído a Yun Che? ¡Esto es lo que deberías estar haciendo!”

En ese momento, Mu Xiaolan sintió como si sus glúteos estuvieran en llamas, ya que simplemente quería resolver de inmediato los asuntos aquí y llevar a Yun Che a Mu Bingyun. Entonces pensarían en contramedidas después de eso. Ella debe… no debe permitir que este caso de hacer trampa se convierta en realidad en el acto.

“Xiaolan tiene razón. De hecho, Ji Hanfeng no tiene los requisitos para intervenir en el proceso y los resultados de los exámenes. Naturalmente, él no tiene los requisitos para hacer que Yun Che tenga un intercambio con Li Mingcheng para demostrar su inocencia.”

Una voz tranquila resonó desde la parte posterior. La persona que habló era naturalmente Mu Sushan. Al escuchar a Mu Sushan venir a su rescate, Mu Xiaolan exhaló un gran suspiro de alivio en su corazón. Justo cuando estaba a punto de lanzar una mirada agradecida, las siguientes palabras de Mu Sushan casi la hicieron saltar.

“Pero, yo sí.”

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