domingo, 11 de junio de 2017

ED CAP 161

Capítulo 161: Tratando con los Muertos (1)

Cuando entraron en el cementerio, de repente, expertos como Li Shuangyan y Shi Gandang inmediatamente sintieron que había innumerables ojos deslumbrantes de la espesura, cuevas, e incluso bajo tierra. Mirándolos fijamente, salieron muchos cadáveres.

Viendo la repentina llegada de los Cadáveres de Tierra causo que el grupo se asustara mientras sus piernas temblaban.

«Clang… Clang… Clang…» Sin embargo, en este momento, Li Qiye utilizó el mazo de cobre para golpear el pequeño gong para crear un misterioso sonido rítmico.

«El cielo dura por siglos, y la tierra es inmensa y oscura. Regreso a la carretera, regreso al puente; el Mensajero de la Antigua Tierra Celestial está aquí… Dioses y demonios, junto con los Cadáveres de Tierra, todos tomar tres templos de vuelta…» En este momento, Li Qiye cantó en la parte superior de sus pulmones junto con el zumbido rítmico del gong.

El sonido del gong junto con el grito mezclados en un canto resonante e indescriptible.

Dentro de la armonización de los dos sonidos distinguidos, la atmósfera de repente se volvió aterrorizada. ¡Era como si alguien en la oscuridad fue conduciendo subrepticiamente estos cadáveres, causando los pelos de puntas en los demás!

Pero como el sonido del gong junto con el canto resonó, los Cadáveres de Tierra retrocedieron lentamente como fantasmas y se escondieron en las espesuras, las cuevas y bajo tierra…

¡Al ver esta escena, el grupo asombrado de Nan Huairen finalmente comprendió por qué Li Qiye valoró tanto la ropa harapienta!

«El cielo dura por siglos, y la tierra es inmensa y oscura. Regreso a la carretera, regreso al puente; el Mensajero de la Antigua Tierra Celestial está aquí… Dioses y demonios, junto con los Cadáveres de Tierra, todos tomar tres templos de vuelta…» Li Qiye continuó golpeando el gong y gritando mientras caminaba lentamente hacia el cementerio.

Las colinas ondulantes, junto con los ríos que fluyen rápidamente entre las pintorescas montañas y ríos, eran el cementerio de innumerables cultivadores. Incluso los grandes personajes junto con existencias invencibles de generaciones fueron enterrados aquí.

Penetrando en el cementerio los dejó expuestos al torrente de energía de cadáver que fluía de esta tierra. Comenzó a reunirse alrededor del grupo de Li Qiye.

Viendo la energía de cadáver rizándose a su lado, los corazones del grupo de Nan Huairen se volvieron fríos. Si la energía de cadáver penetró en sus cuerpos, esto no sería una buena cosa. Si era ligero, entonces sus cultivos se debilitarían, si era pesado, entonces se convertirían en Cadáveres de Tierra.

En este momento, la caja larga que Li Qiye llevaba en su espalda ejerció un ligero toque de brillantez y emitió lentamente ondas de un aroma medicinal e indescriptible. Este aroma era tres partes de un olor a pescado y siete partes de almizcle. Se quedó en el aire y veló continuamente a su grupo.

Hablando de extrañeza, cuando este olor medicinal se enrollo alrededor de sus cuerpos, la energía de cadáver no tenía manera de acercarse.

A medida que profundizaban en el cementerio, la energía de cadáver se volvió más severa. Los lugares con una alta densidad de Cadáveres de Tierra tendrían una energía de cadáver aún más fuerte. Sin embargo, no pudo invadir al grupo de Li Qiye. Esta armadura medicinal protegió al grupo de Li Qiye todo el camino hasta el frente.

No fueron ni rápido ni lento, y comenzaron a subir las montañas y atravesar los ríos. Paso a paso, fueron adelante y se encontraron con innumerables Cadáveres de Tierra que consistían en cultivadores humanos, cultivadores demonios e incluso Inmortales Fantasmas y Demonios Celestiales… Además, estos Cadáveres de Tierra eran todos cultivadores poderosos cuando estaban vivos.

Aun así, con Li Qiye gritando a lo largo del camino mientras rompía su gong, muchos Cadáveres de Tierra sólo se quedaron en la distancia cuando llegaron cerca. No atacaron al grupo de Li Qiye. En su lugar, volvieron a sus viejos lugares.

Vieron muchos ataúdes por el camino; Ataúdes de bronce, ataúdes de madera, ataúdes de arcilla, ataúdes de piedra, ataúdes de oro, e incluso ataúdes hechos de madera divina… Muchos ataúdes fueron colgados sobre los misteriosos acantilados. Algunos flotaron en el agua, y otros se hundieron bajo el lago, mientras que unos pocos yacían en la parte superior de los árboles gigantes…

Viendo todos estos viejos y nuevos ataúdes dejó al grupo de Nan Huairen con escalofríos. ¡Este lugar llamado el Antiguo Cementerio Celestial fue completamente apropiado porque enterró a muchos cultivadores aquí!

También tenían curiosidad de saber si había cadáveres en los ataúdes, pero sin el permiso de Li Qiye, no se atrevieron a tomar ninguna acción precipitada.

De hecho, se preguntaban por qué los Cadáveres de Tierra no podían atacarlos con su hermano mayor abriendo el camino con el gong y gritando cantos arcaicos.

Pasaron por innumerables montañas y ríos antes de detenerse en un valle llano. Este valle era como un campo de cultivo abandonado; tenía una apariencia muy metódica. Si esto no fuera el Antiguo Cementerio Celestial, otros pensarían que había alguien cultivando en este lugar.

«Este será el primer Señor del Tesoro elegido.» De pie en el valle, Li Qiye juzgó este lugar y tomó su decisión.

En este momento, había bastantes Cadáveres de Tierra errantes fuera con sus ojos emitiendo una luz débil e infernal. Eran como los ojos de los muertos o demonios malignos, dando a otros una terrible sensación.

Estando de pie dentro, estaban un poco asustados. La generación más vieja, como Shi Gandang, hacia mejor, pero el grupo más joven asumió que el Señor del Tesoro no era diferente de un señor demonio maligno. Tal vez incluso tenían cuernos de bestia y eran cien zhang de alto con largo cabello verde.

«Uno, llamo a tu residencia; dos, saludo al Señor del Tesoro; tres, preguntando sobre una transacción. El Mensajero de la Antigua Tierra Celestial, llevando la Antigua Medicina Celestial, teniendo la energía yin del inframundo, entrando en la Montaña del Tesoro, pisando la tierra yin, golpeando en la puerta del infierno…» gritó Li Qiye mientras caminaba alrededor del valle golpeando su gong.

Li Qiye giró a la izquierda tres veces y se movió a la derecha tres veces antes de detenerse finalmente. Echo una gota de sangre de carne en el suelo y gritó: «¡Una sangre para convertirse en amigos, una cosa no debe ser intentada más de tres veces, salir de su ataúd…!» ¡Finalmente terminó sus gritos y se inclinó en el suelo!

La ceremonia de Li Qiye causó que el grupo de Li Shuangyan se asustara. Este tipo de ceremonia no fue nada como una transacción. Era más como una invocación de fantasmas.

Sin embargo, el siguiente evento fue aún más aterrador. “Boom, boom, boom”. Sonaron ruidos ensordecedores y la tierra parecía abierta. De repente, toda la tierra del valle se iluminó y ola tras ola de luz se derramó hacia afuera y se entrelazó en una gran formación. Esta formación brilló intensamente, y los claros sonidos de espadas se produjeron continuamente con un aura dominante como lo maremotos — ¡torrenciales y sin fin!

En un parpadeo, con un “Bang“, un ataúd flotaba lentamente desde el suelo. Este ataúd era de color violeta y tallado con dragones y fénix. Era evidente que este ataúd había experimentado innumerables lunas.

Al ver este ataúd, las personas no podían dejar de asustarse en sus corazones. Dentro estaba una persona muerta, ¡y una persona muerta aterradora que quería vivir de nuevo en eso!

«¿Qué tienes para cambiar?» Finalmente, una voz decrépita salió del ataúd.

Li Qiye se agacho en el suelo y se quitó la vieja caja sobre su espalda. Luego, él dijo lentamente: «Antiguo Cementerio Celestial, Mensajero de la Antigua Tierra Celestial, objeto comercial. Sólo una Antigua Medicina Celestial, bañada en la energía yin del inframundo. La caja está cerrada, Antigua Medicina Celestial, imposible de obtener. El principio Celestial Antiguo, una cosa no se debe intentarse más de tres veces, todo tiene un principio y un fin.»

«Zha—zhaa-zhaa» Finalmente, el ataúd violeta se abrió lentamente, y la persona interior dio un paso hacia fuera.

En este momento, todos vieron claramente al viejo devoto daoísta que salía del ataúd. Este viejo daoísta era incomparablemente viejo. Llevaba una corona de oro violeta mientras sostenía un cetro de cola de caballo fénix. Vestía Botas del Tesoro de Nube Inmortal y había una cresta dao bordada en su pecho.

A pesar de que el viejo daoísta tenía los ojos cerrados y no hubo poder en su cuerpo, había un aura sin fin y majestuosa que causó temblar a otros. ¡Este daoísta era absolutamente poderoso cuando estaba vivo!

«El Maestro de la Secta de la Nube Violeta…» Viendo la cresta en frente del pecho del viejo daoísta, Nan Huairen no pudo evitar exclamar.

Cuando Nan Huairen abrió su boca, el viejo daoísta de repente abrió los ojos y reveló dos rayos sangrientos. Estos dos rayos sangrientos, como las flechas de los dioses, dispararon hacia Nan Huairen.

«No es bueno.» La expresión de Niu Fen cambió sumamente y de inmediato balanceo horizontalmente su pequeña concha en su espalda. Un ruido de “Boom” explotó. Los dos rayos sangrientos dispararon en la pequeña concha de Niu Fen y explotaron como los truenos de cielo mientras Niu Fen fue eliminado volando lejos. Nan Huairen también fue derribado por los restos de la explosión, y él locamente escupió una bocanada de sangre.

Fue tan poderoso que inculcó escalofríos en las espinas de todos. Niu Fen era una existencia enigmática dentro de sus filas. Sólo Li Qiye sabía claramente lo poderoso que era. Pero en este momento, Niu Fen fue derribado por los dos rayos; sólo se podía imaginar cuán poderoso debía ser este viejo daoísta frente a ellos.

«Clang…» Cuando el viejo daoísta abrió los ojos por segunda vez, Li Qiye golpeó fuertemente el gong. ¡El sonido del gong, como las grandes olas y fuertes vientos, voló hacia el viejo daoísta!

«¡Boom!» ¡Cuando la onda de sonido golpeó su cuerpo, el cuerpo del viejo daoísta tembló y tuvo que dar unos pasos atrás!

«Joven Junior es tonto y te ofendió con su boca. No habrá una segunda vez.» Li Qiye dijo solemnemente mientras miraba al viejo daoísta: «Si todavía quieres negociar, tú y yo nos sentaremos. Si no, daré la vuelta y me iré. Dentro del Antiguo Cementerio Celestial, estoy seguro de que hay muchos que están dispuestos a comerciar conmigo.»

Eventualmente, el viejo daoísta se sentó con sus ojos todavía cerrados. Era como si estuviese profundamente dormido.

En ese momento, Nan Huairen se arrastró lentamente, pero no se atrevió a decir ni una palabra. Incluso si quería agradecer a Niu Fen, todavía no se atrevió a hablar. Los otros jóvenes tenían sus bocas bien cerradas. Incluso eran cuidadosos con su respiración.

«Medicina fuera…» Después de sentarse, el viejo daoísta finalmente dijo dos palabras.

Li Qiye entonces desbloqueó el sello de la caja. El sello era muy extraño, y no se abrió con encantamientos de ley de mérito ni fuerza violenta. En cambio, se abrió con un símbolo de palma muy extraño en la parte superior de la caja. Entonces, la caja se abrió lentamente.

Li Shuangyan y Chen Baojiao, que estaban relativamente cerca de Li Qiye en este momento, claramente vieron todo. La caja del tesoro tenía nueve artículos, y todos eran diferentes. Por otra parte, no sabían los nombres o lo que ninguno de esos nueve artículos era.

Li Qiye miró cuidadosamente los artículos dentro de su caja del tesoro. Finalmente tomó un artículo tan pequeño como una semilla de almendra y lo colocó suavemente en el suelo, y dijo cuidadosamente:

«Un Antiguo Núcleo Celestial de Cadáver, el creador del núcleo es un Dragón Secreto. Así, onduló a través de los antiguos tiempos celestiales durante ochenta mil años, ¡y sería capaz de levantarte diez vidas útiles celestiales!»

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