domingo, 11 de junio de 2017

ED CAP 163

Capítulo 163: Tesoro del Continente Medio (1)

Finalmente, Li Qiye eligió un lago profundo. Tenía agua estancada donde el fondo no estaba a la vista. Exudo una atmósfera fría y supresora. La gente no podía dejar de temblar de pie junto al lago.

«Hoom…»

Después de que Li Qiye terminara su ceremonia de transacción, todo el lago profundo derramó un brillo tan oscuro como la tinta negra. Las olas y olas de luces negras semejantes a espadas demoníacas se elevaron a los cielos, haciendo que otros temblaran sin la frialdad. Fue como si un diablo estuviese surgiendo desde el subsuelo.

«Xshhh… Xshhh… Xshhh…» Cuando todas las luces negras se entrelazaron en un solo lugar, apareció una risa tortuosa. Una sombra salió de la luz negra sin un ataúd. Además, esta sombra fue totalmente envuelta con neblina negra tan espesa como tinta, haciendo su apariencia real imposible de discernir. Dentro de la neblina negra, había ruidos de rugidos junto con niebla transformadora. Parecía como si hubiese una bestia feroz prehistórica que quiera salir corriendo.

La energía maligna de esta sombra causo que el grupo de Nan Huairen se encogiera. Esta energía maligna afectó directamente sus almas como si un diablo tuviese su mirada en ellos.

«Xshh…» La sombra que se acercaba soltó una risa insidiosa y habló diabólicamente: “El Mensajero de la Antiguo Cementerio Celestial, aunque he oído hablar de esto, esta es mi primera vez viendo uno. ¡Niño, entregue todos los Tesoros de Cadáver, entonces tal vez te ahorraré de la muerte!

Las primeras palabras de este Señor del Tesoro después de aparecer cambiaron los colores de todos. No esperaban el repentino levantamiento de este Señor del Tesoro; no era como el viejo daoísta que siguió la regla de la transacción.

«Si se trata de una transacción, le doy la bienvenida. ¡Si quieres robar, entonces lárgate para mí!» Sólo Li Qiye seguía tan tranquilo como una montaña mientras enfrentaba a este Señor del Tesoro con la energía maligna perforando el cielo.

«Pequeña Cosa, cuando yo estaba vivo, mi título solo sería suficiente para asustarte!» La sombra negra ominosamente habló.

Li Qiye sonrió sin cuidado y respondió: «Sólo un remanente de la Dinastía Dragon Antiguo Ming, no lo suficiente para alcanzar el ápice. Hoy en día, si desea comerciar, entonces saque el patrimonio de su Dinastía Dragon Antiguo Ming. Si no, entonces vuelve al infierno y regresa a tu tumba para mí.»

«Pequeño Demonio, ¿quién eres tú…» La sombra inmediatamente gritó como el trueno y, en este mismo segundo, hizo un movimiento. Una horrible mano negra llego y golpeó directamente hacia Li Qiye.

Una mano horrible que podía conquistar incluso el cielo y la tierra y llevar el sol y la luna, fue capaz de captar el Yin y el Yang. Con sólo esta mano, incluso las almas de los Reyes Celestiales se alejarían. No importaba que esta sombra fuese una persona muerta con fuerza de vida no existente. ¡En este momento, todavía era una existencia increíblemente aterradora!

«Clang– Clang– Clang» Sin embargo, con la vida y la muerte delante de sus ojos, Li Qiye — al igual que la tormenta — golpeó en el Gong de Cadáver Asustado. Los sonidos torrentosos del gong se precipitaron, moliendo en la gran tierra y sorprendiendo hasta el cielo encima y el infierno abajo.

«¡Ahh! —» Un grito lamentable sonó, haciendo que el grupo de Niu Fen saltara. Todos pensaron que Li Qiye fue capturado por la sombra negra, pero cuando todo quedó claro, todos fueron congelados.

De repente una mano penetró por debajo de la tierra. Esta mano marchita parecía una garra de pájaro. Estaba cubierta de plumas verdes. La mano salió precipitadamente del suelo y agarró la sombra negra en un instante. Las garras extremadamente afiladas atravesaron la sombra negra mientras rugía y gritaba.

Cuatro gotas de sangre cayeron de la sombra negra. Eran extremadamente brillantes, como cuatro diamantes de sangre. Fueron devoradas inmediatamente cuando golpearon el suelo y emitieron una voluta de humo.

«Una sangre, un año. ¿Y qué si estuvieses enterrado por millones de años? Al final, todavía tenías que devolverlo al Antiguo Cementerio Celestial.» Viendo las cuatro gotas de sangre desapareciendo en el suelo, Li Qiye sonrió y dijo con indiferencia.

Después de ser amasado por la garra verde de plumas, la sombra negra fue completamente aniquilada sin sí siquiera cenizas o huesos dejados. Bajo esta garra de plumas verdes, incluso si alguna vez fue un personaje feroz con títulos ilustres que barrían las ocho direcciones, no fue suficiente para llegar al ápice. Estarían estrangulados como una hormiga.

«BOOM…»

La garra de plumas verdes se hundió de nuevo en el suelo, y el lago de la muerte también se derrumbó. Esta ubicación finalmente se convirtió en una llanura plana.

«Una Tierra del Tesoro Feng Shui destruida, y una nueva nacerá.» Li Qiye lentamente sonrió y dijo: «Los perros no pueden cambiar su hábito de comer mierda. ¡Después de millones de años, incluso un remanente todavía piensa que es un supremo Antiguo Ming! Si no terminara tu existencia, sería un desajuste para mí.»

Las piernas del grupo estaban débiles por el miedo y cayeron al suelo. Shi Gandang y Tu Buyu, escuchando las palabras de Li Qiye, tenían sus corazones en estado de shock. Li Qiye — desde el principio — no quería comerciar con el oponente. Más bien, ¡él sólo quería matarlo — Li Qiye quería matar al Señor del Tesoro en esta Tierra del Tesoro Feng Shui!

Shi Gandang solía ser un monstruo feroz y Tu Buyu viajó a través de las ocho direcciones y había visto muchas cosas. Sin embargo, sus espinas corrían frías. Trazando contra un Señor del Tesoro — ¡no mucha gente se atrevería a hacerlo!

La aparición repentina de la mano de plumas verdes también asustó a innumerables Cadáveres de Tierra en esta área. En este momento, incluso los poderosos Cadáveres de Tierra se escondían en sus nidos sin atreverse a salir.

«¿Qué era esa mano de plumas verdes?» La persona más tranquila fue todavía Li Shuangyan. Aunque estaba sorprendida, ella todavía preguntó con calma.

«Regla, castigo, ley de hierro del Antiguo Cementerio Celestial… Puedes llamarlo como quieras.» Li Qiye sonrió: «Soy un Mensajero de la Tierra en este momento para realizar transacciones, para quien viola el acuerdo será castigado.»

«¡Esa cosa de antes era un Antiguo Ming!» Niu Fen tomó una respiración fría y dijo: «¡De hecho, vino de la Dinastía Dragon Antiguo Ming en las leyendas! ¡Esta, esta es la antigua dinastía construida por el Emperador Inmortal Long Ming ah!»

«Solo fue una hez de la sociedad. ¡En el Mundo del Emperador Mortal, si cualquier Antiguo Ming se atreve a actuar arrogante, entonces morirá sin piedad!» Li Qiye sin emoción dijo.

Los jóvenes no se atrevieron a interponer mientras que la generación anterior, como Shi Gandang, estaba horrorizado por estas palabras. Ellos sentían que Li Qiye tenía una inefable intención asesina contra el Antiguo Ming como si fuesen enemigos.

Naturalmente, sentían que era imposible. El primer clan del Antiguo Ming no había aparecido en el Mundo Soberano Humano durante decenas de millones de años. ¡¿Cómo podría un niño de quince años ser enemigo de la Raza Antiguo Ming?!

«El cielo dura por siglos, y la tierra es inmensa y oscura. Regreso a la carretera, regreso al puente; el Mensajero de la Antigua Tierra Celestial está aquí… Dioses y demonios, junto con los Cadáveres de Tierra, todos tomar tres templos de vuelta…» Mientras que la generación más joven — incluyendo a Li Shuangyan — tenía muchas preguntas, Li Qiye no les respondió y continuó el viaje de encontrar más Tierras del Tesoro Feng Shui.

Después de cruzar las altas montañas, Li Qiye finalmente eligió la tercera Tierra del Tesoro Feng Shui y el segundo Señor del Tesoro.

Esta era una antigua cueva insondable. Después de que Li Qiye realizó la ceremonia de transacción, surgieron olas y olas de ruidos. Al cabo de un rato, todos vieron cuatro esqueletos que llevaban un ataúd gigante de la antigua cueva.

Este ataúd era excesivamente extravagante. Fue elaborado por el raro y precioso Metal Pesado Celestial; esto fue un metal del grado más fino utilizado para crear armas increíbles.

Cuando el ataúd gigante descendió, el sonido resonante apareció e incluso la gran tierra tembló. Un anciano de rostro pueril y cabello gris salió. Aunque llevaba una túnica común de algodón liso, no estaba manchado de incluso una partícula de polvo. Era como si él fuese un anciano inmortal que salía de una pintura. Si sus ojos no estaban cerrados y éste no era el Antiguo Cementerio Celestial, entonces a otros les resultaría difícil imaginar que este anciano inmortal delante de ellos era una persona muerta.

«Un poco interesante, incluso el descendiente del Pabellón Multitud Inmortal no es una excepción y todavía quiere renacer.» Li Qiye se sentó en el suelo y calmadamente dijo.

Al escuchar las palabras “Pabellón Multitud Inmortal”, los pequeños estaban bien mientras el grupo de Niu Fen tembló con desconcierto. El Pabellón Multitud Inmortal era una existencia extremadamente misteriosa y fue famoso junto con el Templo Dios de Guerra. Sin embargo, eran mucho más discretos que el Templo Dios de Guerra. El mundo rara vez veía a los discípulos del Pabellón Multitud Inmortal, pero cualquier discípulo del pabellón era desafiante para el cielo.

Esta persona era descendiente del Pabellón Multitud Inmortal… ¿Qué clase de poderosa y aterradora era esta existencia?

«Sólo soy un mero discípulo un filial que no es digno de las tres palabras Pabellón Multitud Inmortal.» Aunque era una persona muerta enterrada en este lugar, el anciano habló de una manera tan agradable y amable; era como una suave brisa de primavera que pasaba.

Li Qiye sonrió y sacó una raíz tallo de la caja de la Antigua Caja del Tesoro Celestial. No era demasiado larga y era de un color dorado que parecía como si estuviese hecho de mineral divino Esta raíz de oro carmesí parecía haber sido comida por insectos; tenía muchos pequeños agujeros.

«Si vienes del Pabellón Multitud Inmortal, entonces no necesito muchas palabras acerca de dónde se encuentra en el Antiguo Cementerio Celestial esta hebra de Devorador de Insectos de Oro Carmesí» Li Qiye colocó este artículo delante de él y dijo.

El anciano reflexionó por un momento, y lentamente sacó una pagoda de piedra y la colocó delante de él. Esta pagoda de piedra no era grande e incluso podría ser descrito como muy áspera. Pero de nuevo, fue pulida sin bordes, como si hubiese sido pulida una y otra vez.

«Antigua Pagoda Misteriosa — una pagoda para pasar por el inframundo, un Tesoro Misterioso de Dao Extranjero que es capaz de bloquear el gran dao por encima y suprimir todos los males por debajo. ¡Fue pulido en mis manos durante 80.000 años!» El anciano dijo cuidadosamente.

«Trato.» Li Qiye tomó de inmediato la Antigua Pagoda Misteriosa y la lanzó a Shi Gandang mientras hablo: «Ya que usted ya es un asesor invitado de la Antigua Secta Incienso de Purificación, esto será considerado como un regalo introductorio. Mientras sigas siendo leal, ¡la Antigua Secta Incienso de Purificación no te maltratará!»

Shi Gandang no pensó que él tendría una parte con los tesoros, así que rápidamente recuperó su ingenio y se inclinó solemnemente hacia Li Qiye. ¡Este respeto vino del corazón!

El anciano aceptó la raíz de Devorador de Insectos de Oro Carmesí y contempló un poco antes de colocar otro artículo en el frente.

Este fue un espejo que tenía un estilo antiguo. Su material era desconocido, pero el espejo era cóncavo hacia adentro como la boca de un pez. En el momento en que apareció este espejo, ¡surgió un aura de Paragon Virtuoso!

«Espejo de Transformación de Pez Dragón — hecho de Cobre Santo de Pez Dragón con siete runas de Metal del Tesoro de Gran Dao. A pesar de que las siete runas no se convirtieron en palabras y frases, este Tesoro de Vida había seguido toda mi vida, ¡un Tesoro de Vida de Paragon Virtuoso!» El anciano dijo.

Esta frase dejó los corazones de los jóvenes temblando. Un Tesoro de Vida de Paragon Virtuoso — tan aterrador y poderoso. De Siete Runas de Cobre Santo… Este Tesoro de Vida era demasiado valioso. ¡Ellos saben, en la Antigua Secta Incienso de Purificación, el primer anciano también tuvo uno!

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