MGA CAP 0309

Capítulo 309 – Cree en El

“Chu Feng, te lo ruego. No mates a mi padre.” Mientras Su Mei que estaba escondido en el abrazo de Chu Feng abrazó Chu Feng, ella levantó su carita dulce y agradable a la vista de Chu Feng con los ojos ya llorosos. Su dulzura y suavidad actualmente fueron usadas hasta su límite.

“Chu Feng, le sobra. Después de él, él es nuestro padre.” Su Rou también rogó. Los ojos de ella, que por lo general eran fuertes, también comenzaron a enrojecerse. Podría verse que en el fondo de su corazón, ella también tenía sentimientos muy fuertes hacia Su Hen. La llamada “sangre es más espesa que el agua”, y de hecho era así.

Cuando se enfrentó a las suplicas de las dos personas que amaba, la ira en el corazón de Chu Feng también comenzó a desaparecer gradualmente. La intención asesina que emanaba también se retrajo gradualmente. Le dijo a Su Rou y Su Mei, “Incluso si lo dejo ir, la gente de la Escuela Lingyun y la Mansión del Príncipe Qilin no van a dejar que se vaya.”

“Chu Feng, debes tener una forma ¿Cierto? Lleva a mi padre contigo. Creo que va a cambiar y empezar de nuevo.” Su Mei rogó y le dijo.

“Chu Feng, trae a mi padre con nosotros y vamos a salir juntos. Juntos, vamos a darle una oportunidad.” Su Rou también estaba suplicando.

En ese instante, Chu Feng estaba en una situación un poco difícil, porque realmente no quería traer a una persona en la que no confiaba a ese lugar. Pero después de ver a las dos bellezas delante de él, él todavía mordió y le dijo a Su Hen, “Debes estar feliz de que tienes dos hijas buenas.”

Por último, Chu Feng dejó a Su Hen ir. No sólo él no mato a Su Hen, en cambio, se preparó para traer a Su Hen junto con las hermanas Su Rou y Su Mei de regreso a la Escuela Dragón Azur y planea establecerlos a todos en la Escuela Dragón Azur. Antes de salir, Chu Feng le dio a Su Hen algún tiempo para dejar que su familia Su dispersarse.

A pesar de que al hacer esto, la familia Su desaparecería y los miembros de la familia Su estarían sin hogar, sus vidas se salvarían. Al ver que su familia Su que se desarrolló en la Ciudad Ave Bermellón durante muchos años se dispersa así, el rostro de Su Hen era complicada. El que casi muere ya no parecía ser codicioso como antes y era como si viniera a la realización de algo.

Después de eso, como Su Rou y Su Mei rogaron, cogió a su hermano mayor Su Long de su lugar también y con su familia de cuatro personas, corrió hacia la Escuela Dragón Azur.

“Chu Feng, gracias por dejarme con mi vida. Yo…” En la parte superior del Águila cabeza blanca Su Hen estaba sentado junto a Chu Feng y parecía querer decir algo, pero al final, no pudo.

“No hay necesidad agradecerme por nada. Te deje con su vida sólo por tus dos hijas. Yo, Chu Feng, sé cómo se siente no tener padre, por lo que no quiero que tengan un sabor de esa sensación tampoco.
Yo sé que aun hasta ahora, no puede dejar ir a la familia Su, no puedes dejar que tantos miembros de la familia Su vayan, pero hay que saber que para usted, las personas más importantes deben ser sus dos hijas y su hijo porque cuando este cerca de la muerte, son las únicas personas que estarán dispuestos a sobresalir para protegerte.” Chu Feng en serio recordó.

“Mm. Estás en lo correcto. Yo estaba demasiado confundido antes. En el futuro, sin duda voy a hacer mi mejor esfuerzo para compensarlos.” Su Hen tenía remordimiento en su rostro.

“Además, yo necesito recordarle esto. Para la gente, lo más importante es la dignidad. Si usted vive la vida como lo acaba de hacer sin ninguna dignidad, nunca, jamás tendrás a nadie mirándote con buenos ojos o buenas impresiones. Para siempre, sólo serás llamado aquí y allá como a un perro por otros. Cuando sea necesario, te usarían. Cuando no sea necesario, te matarían en cualquier momento.” Añadió Chu Feng.

“Eh… Tal vez estás en lo correcto, pero cuando una persona no tiene la fuerza suficiente pero aún proteger necesita una familia de viejos y jóvenes, son verdaderamente impotente.” Su Hen sonrió muy impotente.

El corazón de Chu Feng fue sacudido de repente cuando vio a Su Hen así. A pesar de que él de hecho era codicioso por la vida y tenia miedo a la muerte, en realidad, no era tan horrible como se imaginaba. Sólo estaba usando sus propios métodos para protegerse a él y su familia, para proteger a su clan. Sin embargo, fue sólo que su método era demasiado débil y no fue aprobado por Chu Feng.

Pero cuando una persona no tiene la fuerza suficiente ni un fondo poderoso, ¿Qué podrían hacer si querían protegerse a sí mismos y a su familia? Tal vez la mayoría de la gente sería como Su Hen también. Verse obligado a ceder con el fin de mantener la seguridad, e ignorando los daños a largo plazo por los beneficios a corto plazo. Debido a eso, si querían vivir, que realmente no tenían otra opción.

Con un poco de reflexión cuidadosa, Chu Feng sentía que realmente no podía culpar por completo a Su Hen porque en este mundo, no existía un pequeño número de personas que vendían a sus hijos e hijas para vivir. A pesar de tener la fuerza suficiente, no era parte de la razón, la parte más importante era que este mundo era demasiado real, y la realidad era demasiado cruel.

Después de un tiempo de apresuramiento, Chu Feng envió con éxito a Su Rou, Su Mei, Su Long, y Su Hen al Cementerio de Mil Huesos. En ese instante, el corazón tenso de Chu Feng, finalmente se relajó.

No importa si iba a vivir o morir después de su viaje, al menos en la actualidad, había una garantía de seguridad para las personas que eran más importantes para él. Después de establecerlos bien, Chu Feng se iba a ir, pero no importa qué, Su Rou quería salir para enviar a Chu Feng fuera.

“Chu Feng, ¿Realmente tienes que ir? Yo sé que Senior Qi Fengyang te dio bondad tan pesada como una montaña, pero ya sabes claramente que en este viaje, no tendrás mucha suerte. Sin embargo, todavía quieres ir. Esta no es una acción inteligente, y creo que si Senior Qi Fengyang lo sabe, él tampoco estaría dispuestos a dejarte hacer esto.”

Dentro del bosque de la montaña sobre el Cementerio de Mil Huesos, Su Rou estaba agarrando con fuerza la mano de Chu Feng. Sus dos ojos enrojecidos, y dos filas de las lágrimas corrían por su rostro encantador. Ella sabía lo que Chu Feng iba a hacer, y ella realmente no quería enviar a Chu Feng a la muerte.

“Quédate aquí, guarda, y cuida de pequeña Mei y mi familia. En este lugar, puedes obtener poder aún más fuerte, y te confió todos ellos a ti.” Chu Feng sacó la mano de Su Rou.

“¿Debes realmente hacer esto?” Sin embargo, Su Rou agarró la mano de Chu Feng de nuevo y la agarraba con más fuerza.

En ese instante, Chu Feng no explico excesivamente. Sólo ligeramente sonrió y dijo: “Si no hago esto, no voy a ser Chu Feng. Tú me entiendes.”

Después de escuchar las palabras de Chu Feng, Su Rou estaba un poco conmovida. Ella, efectivamente, entendía a Chu Feng. No era que no era lo suficientemente racional, sino que elegiría sofocar su racionalidad muchas veces para ignorar cualquier cosa, ignorar las consecuencias con el fin de hacer las cosas que él sentía era correcto. Así era como hacia las cosas. Ese era Chu Feng.

“Vamos a estar aquí y esperar a que vuelvas.” Su Rou finalmente soltó su mano y su ternura hizo que el corazón de uno a doliera.

“Bueno, voy a volver rápidamente.” Chu Feng limpió suavemente las lágrimas del rostro de Su Rou, luego le dio un beso en la frente.

Su Rou tampoco lo molestaba más y se dio la vuelta y entró en la entrada de la Formación Espiritual del Cementerio de Mil Huesos. Después de que Chu Feng dejó el Cementerio de Mil Huesos, se levantó en el aire.

Dio un paso en el cielo y se paro en el horizonte. Pensando en el pasado, veía a la gran Escuela Dragón Azur, el lugar que le enseñó sobre la cultivacion marcial. Lo hizo porque no sabía si la Escuela Dragón Azur todavía estaría ahí la próxima vez que regresara aquí.

* Zas *

De repente, Chu Feng saltó y se convirtió en una fila de luz, mientras volaba hacia el horizonte lejano. No monto el águila cabeza blanca porque en la actualidad, estaba bastante corto de tiempo. En situaciones como esa, obviamente, su Técnica Imperial Celestial sería más rápido que el águila de cabeza blanca.

Al mismo tiempo que Chu Feng dejó la Escuela Dragón Azur, Su Rou volvió al Cementerio de Mil Huesos. Cuando entró en el Cementerio de Mil Huesos y su visión volvió a la normalidad, descubrió que todo el mundo en el Cementerio de Mil Huesos ya estaba de pie en una fila mirándola con las caras complejas. Algunas personas que eran más jóvenes no podían sostener el dolor en sus corazones y comenzaron a sollozar en silencio.

“¡Hermana!”

De repente, Su Mei saltó a los brazos de Su Rou y en voz alta exclamó. Su grito era anormalmente triste y de eso, casi todo el mundo en la escena no pudo evitar enrojecérseles los ojos.

En ese instante, los ojos de Su Rou también enrojecieron también pero ella forzosamente se retuvo y no lloro. Acarició el pelo negro y brillante de Su Mei y dijo: “¡Tenemos que creer en él!”