ATG CAP 1079

Capítulo 1079 – Tragedia

La Ciudad Darkya anteriormente era un lugar de peligro absoluto para Yun Che. Él estaba constantemente nervioso, moviéndose como si estuviera en vilo.

Sin embargo, a partir de ahora, no podría importarle menos. No le importaba en absoluto si el Gremio Mercantil Pluma Negra descubriera su rastro. Lanzó su energía profunda al máximo, enviando rayos brillantes atravesando los cielos sobre la Ciudad Darkya. Cada rayo traía consigo un chillido penetrante.

Cuando llevó a He Lin a los terrenos secretos de los espíritus del bosque, había escaneado cuidadosamente el cuerpo de He Lin en busca de huellas de rastreo…

¡Pero quién hubiera pensado que existía algo como ese ”Incienso Persecución de Alma de Miles de Millas”!

Tenía que ser falso… ¿Cómo podría existir tal cosa? ¡Definitivamente no podría!

Se alejó a toda velocidad mientras la Ciudad Darkya desaparecía lentamente en la distancia. Apretó los dientes con fuerza, casi rompiéndolos un poco en el proceso.

Se había quedado en los terrenos secretos durante aproximadamente media hora. Desde el momento en que se fue hasta ahora, solo habían pasado de tres a cuatro horas. Si todo lo sucedido hubiera sido cierto, entonces dentro de este periodo de tiempo…

¡Será mejor que esto no sea real!

Yun Che salió cargado de la Ciudad Darkya como un trueno, su velocidad fue varias veces la de cuando había llevado a He Lin a casa. Frenéticamente voló hacia el sudeste en dirección a la espesa jungla sin detenerse por un momento.

Al entrar en la densa jungla, Yun Che no bajó la velocidad, atravesó el follaje como un tornado furioso, enviando madera, pasto y flores girando por el cielo. Uno a uno, los árboles antiguos, que tenían decenas de miles de años, se redujeron a astillas y polvo.

Habiendo memorizado el lugar, Yun Che finalmente llegó a donde estaba la entrada secreta. La fila de árboles antiguos estaba delante de él. Descendió inmediatamente y sus pupilas se encogieron.

La formación ilusoria que envolvía el área estaba completamente rota. Las enredaderas negras verdosas parecían como si un huracán hubiera barrido y las hubiera destrozado. Trozos y pedazos de vid cubrían el suelo.

El mundo por delante era una imagen de silencio, un silencio escalofriante.

El corazón de Yun Che dejó de latir por un momento. Él fijó su mirada hacia adelante cuando sintió que un frío lo rodeaba. Se quedó allí aturdido antes de avanzar lentamente. El sonido de cada paso que daba al pisar las lianas rotas le atravesaba el alma.

Después de atravesar la vid aplastada, se detuvo. Su cuerpo se sacudió y su rostro palideció cuando una expresión de dolor recorrió su rostro. Sentía como si toda la sangre hubiera sido drenada instantáneamente de su cuerpo.

Lo que originalmente era una vasta tierra de esmeralda y jade, ahora era una escena de destrucción y desesperación. Los árboles antiguos fueron derribados, las casas de madera se derrumbaron y todo tenía las cicatrices del combate feroz. Lo que quedaba de la tierra pintoresca ahora solo eran manchas secas de sangre verde y un silencio mortal.

Un cuerpo sin vida tras otro de los espíritus del bosque se esparció por el suelo teñido de sangre. Un cuerpo en particular más cercano a Yun Che todavía tenía los ojos bien abiertos. La luz verde esmeralda ya se había desvanecido de sus ojos, lo que quedaba era una mirada de miedo y desesperanza… Incluso en la muerte, su resentimiento nunca se fue.

“Ah… AHHH…”

Los labios de Yun Che temblaban y sus pupilas se dilataron en estado de shock, casi cubriendo el blanco de sus ojos. Yun Che no podía moverse, como si sus dos pies estuvieran clavados en el suelo. Su visión comenzó a ponerse borrosa y el cielo a su alrededor comenzó a girar.

Agarró su cabeza con ambas manos, sus dedos temblaban como los de un anciano al final de su vida.

Muertos…

Todos están muertos…

Por mi culpa…

Yo causé su muerte… por mi culpa…

“Huff… huff…”

Yun Che tomó docenas de profundas respiraciones antes de que su mente y sus ojos finalmente recuperaran claridad.

Lentamente se adelantó. Todo estaba todavía un poco borroso, pero cada cuerpo, cada gota de sangre verde fresca estaban claramente impresas en su alma… Cada visión era como una daga penetrante y fría, clavándose directamente en su alma.

De vez en cuando, había rastros de la sangre roja de los humanos. Se destacaban como sangrientas manchas sucias que profanaban este santuario ahora en ruinas.

Huuu…

Él tomó otra respiración profunda. El color volvió a su rostro y sus ojos se volvieron normales una vez más. Dio un paso adelante, caminando cuidadosamente a través de este mundo ahora en ruinas.

¡¡Bang!!

Un árbol muy dañado se derrumbó de repente, revelando un espíritu del bosque sin vida… Era delgada y pequeña, su cara vieja y arrugada tenía una expresión de eterna calma.

“Abue Qing Ye…” susurró Yun Che. Levantó la cabeza y lentamente cerró los ojos. He Lin la respetaba más. Ella era el espíritu del bosque más antiguo y respetado en este pequeño mundo. Solo unas horas antes, él incluso había recibido personalmente el Roció Milagroso de Espíritu del Bosque.

“Lo siento. Traje este desastre sobre todos ustedes… Por favor, descanse en paz”, susurró Yun Che suavemente.

La muerte había sido echada por esta tragedia y todo lo que podía hacer ahora era ofrecer una simple disculpa.

Se había calmado pero la inquietud todavía pesaba sobre su pecho. Yun Che voló en el aire y liberó su percepción espiritual con la esperanza de encontrar un sobreviviente… con suerte había espíritus del bosque afortunados… incluso si solo hubiera uno, eso era suficiente.

En frente de una choza en ruinas, Yun Che vio un espíritu del bosque de mediana edad bien constituido. Él ya no tenía vida en él. Su mano estaba sosteniendo una lanza rota. La lanza estaba cubierta con una mezcla de sangre verde y roja.

En su espalda había un agujero grande y sangriento… Debido a que había luchado hasta el final, ni siquiera tuvo la oportunidad de autodestruir su Orbe de Espíritu del Bosque. Sin duda, su Orbe de Espíritu del Bosque había sido retirado a la fuerza después de su muerte.

“Senior Qing Mu…”

Yun Che gentilmente pronunció su nombre, ambas manos temblorosas con los puños apretados.

A su alrededor estaba la mayor parte de los espíritus del bosque de mediana edad. Cada cuerpo estaba lleno de signos de batalla sangrienta y cicatrices de batalla. Todos sus ojos estaban abiertos, llenos de expresiones de miedo, desesperanza y odio… Ninguno de ellos estaba cerrado.

Yun Che continuó volando en silencio. Más adelante en este pequeño mundo, vio un espíritu del bosque niño tras otro. Algunos se abrazaban unos a otros, otros abrazaban al viejo… y el más joven, su pequeño y suave cuerpo era atravesado… Un largo cuchillo de hoja negra se alojaba en su cuerpo.

A Yun Che le resultó cada vez más difícil respirar. Luchó por mover su mirada, cuando vio el gran jardín donde había pasado la mayor parte de su tiempo en su primer viaje hasta allí.

Miles de flores fueron esparcidas aproximadamente en el suelo. No habia más mariposas…

Al final del lecho de flores, dos chicas se abrazaban con fuerza la una a la otra. Aunque sus cuerpos no tenían cicatrices ni heridas, no tenían vida dentro de ellos.

Muerte por autodestrucción de sus orbes espirituales.

Yun Che aterrizó y los miró inexpresivamente, “Fei Yan… Qing He…”

Fuera del lecho estaba un joven caído. Su cuerpo estaba lleno de cicatrices, evidencia de las brutales heridas que había sufrido en la batalla tratando de proteger a las dos chicas detrás de él.

“Qing… Zhu…”

La fuerte sensación de asfixia que finalmente retrocedía volvió a cobrar fuerza una vez más, inundando su alma entera, más fuerte que antes.

“… Desearía poder ver el mundo exterior por mí mismo…”

“Siempre pensé que los humanos daban miedo. ¡Nunca hubiera pensado que el Hermano Mayor Yun Che sería un humano tan fuerte y agradable!”

“Este es un amuleto que hice con mis propias manos, te mantendrá a salvo…”

“Hermano Mayor Yun Che… Volverás a menudo para visitarnos…”

“……”

Qing Zhu… Fei Yan… Qing He…

Una mano agarraba su cabeza mientras la otra estaba sobre su corazón, lentamente se agachó. Su corazón se sentía como si estuviera siendo perforado por miles de agujas venenosas. Su cuerpo temblaba de dolor incontrolablemente.

Solo unas horas antes lo habían mirado con asombro, con ojos tan puros y ansiosos. Se aferraron a cada palabra que él había dicho, como si temieran perderse ni siquiera una sola de sus palabras. Había sentido claramente un profundo deseo de esperanza y anhelo en cada una de sus almas.

El destino había sido demasiado cruel para ellos. Lo que era la norma para los demás a una edad similar, no era más que un sueño para ellos. Estaban en la flor de su juventud, pero ahora…

“El… el que… que… causó todo esto…”

“Fui… fui yo…”

Su corazón estaba convulsionando y le castañeteaban los dientes. Clavo en su cabeza con los cinco dedos, clavándolos en su carne, pero no sintió ni un gramo de dolor.

Esta era la segunda vez en su vida que se sentía así.

La primera vez fue cuando estaba en el Continente Nube Azure. Había perdido a su maestro, había perdido a Ling’er. Ya no tenía a nadie a quien aferrarse. Bajo su furia y su locura angustiada, había utilizado la Perla del Veneno Celestial y había tomado todas las vidas dentro de una ciudad entera…

Después de su acto temerario, una cantidad inmediata e insoportable de culpa descendió sobre él, llevándolo al borde de la desesperación…

En ese momento, había matado a millones de personas, la mayoría de las cuales eran inocentes y no tenían odio ni vínculos con él.

Esta vez, cien espíritus del bosque habían perecido. Aunque no por sus manos, todavía sentía el mismo dolor fuerte que en ese momento.

Porqué tuvo que pasar esto…

¡¿De qué eran culpables estos inocentes espíritus del bosque?!

¿Fue solo porque eran demasiado amables y débiles?

No… Fue por mi culpa. Si no fuera por mí… esta maldita maldición, ¿cómo se habrían encontrado con semejante desastre?

¡Todo es por mi culpa!

Si no fuera porque tenía que buscar el Orbe de un Espíritu del Bosque, si no fuera porque mostré misericordia y traje a He Lin de regreso aquí, esto no hubiera…

…………

Espera un minuto… ¿¡He Lin!?

Como si un vaso de agua fría fuera vertido sobre él, Yun Che levantó la cabeza e inmediatamente se levantó. ¿Qué hay de He Lin? He Lin no estaba entre estos cadáveres. ¿Dónde se había ido He Lin?

Yun Che comenzó a volar y una vez más liberó su percepción espiritual lo más rápido posible, cubriendo todo el terreno secreto de los espíritus del bosque. Escaneó cada centímetro de tierra, cada brizna de hierba, cada cadáver de los espíritus del bosque.

Él no detectó a He Lin en absoluto.

Su mente rápidamente se aclaró. Expandió su sentido espiritual hasta donde pudo extenderlo y aún así no encontró el cadáver de He Lin. He Lin todavía podría estar vivo… No, esto era definitivo. ¡He Lin definitivamente estaba vivo!

Esas personas sabían que He Lin era un espíritu del bosque real, definitivamente querían que fuera capturado vivo. Y como He Lin era el único espíritu del bosque que tenía una línea de sangre real, incluso si se metía en la circunstancia más grave y desesperada, ¡nunca se dejaría morir! Sí, ¡definitivamente todavía estaba vivo!

La posibilidad más alta en este momento era que había sido capturado y llevado.

La sangre en el suelo no se ha secado todavía, no podrían haber ido muy lejos.

Yun Che voló más alto en el aire y cerró los ojos. Reunió toda la concentración que podía dominar… Tengo que encontrarlo. ¡Debo encontrarlo!

Hacia el este, sintió rastros de pasos que se abrían paso a través de la jungla. Cerró los ojos y lanzó explosivamente su energía profunda y salió disparado hacia el este como un rayo.