ATG CAP 1111

Capítulo 1111 – Comfortable

Yun Che quedó atónito por un tiempo. Giró la piedra de jade en su mano. Nueve destellos de luz que brillaban como estrellas entraron en sus ojos. Durante un buen rato no pudo creer lo que veía.

Jade de Buda Divino de Nueve Estrellas… Era lo que solo podía desear en sus sueños… Le habían dicho repetidas veces que era extremadamente difícil de obtener incluso en los reinos estelares superiores. Él había “extorsionado” una gran cantidad de piedras profundas de Lei Qianfeng por el bien del Jade de Buda Divino de Nueve Estrellas. De hecho, reconoció que había una gran posibilidad de que nunca la obtuviera, pero ahora… Había aterrizado en sus manos.

¡Era como si acabara de caer del cielo y simplemente se inclinó y la recogió!

Lei Qianfeng era el Rey de un Reino Inferior, ¡¿cómo pudo haber tenido semejante tesoro sobre él?!

Y aparentemente estaba muerto y no se lo habían quitado de su cuerpo.

Y él solo logró levantarlo… y fue lo que había estado buscando todo este tiempo.

¡Esto fue… un golpe extremo de buena suerte!

¿Acaso los cielos finalmente reconocían sus necesidades? ¿Sus ojos finalmente se abrieron?

Aunque sentía una profunda sensación de conmoción e imposibilidad, fue sin dudas una sorpresa muy agradable. Sonrió de oreja a oreja, queriendo reír pero sus emociones estaban en tal flujo que temporalmente olvidó cómo reírse.

Lei Qianfeng había estado muerto hacia bastante tiempo, y su cadáver había comenzado a blanquearse, sin embargo esa cara aterradora y amenazante de él de repente parecía tan agradable para los ojos de Yun Che.

“Lei Qianfeng, cometiste incontables hechos malvados mientras vivías, pero en tu muerte… ¡Has hecho una obra realmente grande y buena! Si me hubieras entregado esta cosa antes… ¡incluso podría haber dejado que tus hijos murieran más rápido!” Yun Che comenzó a murmurarle a Lei Qianfeng. Su corazón estaba acelerado mientras guardaba esta pieza de jade que literalmente “había caído del cielo”.

“Jazmín”, Yun Che levantó la cabeza y sonrió con cariño. “Parece que incluso los cielos quieren que te encuentre una vez más. Todo lo que me falta ahora es el tallo de la Hierba Emperador Inmortal. Definitivamente… ¡definitivamente te encontraré!”

Detrás de él, un aura débil pero familiar se acercó a él. Yun Che dejó de fantasear y dio media vuelta. Vio a una chica con un vestido de siete colores volando en su dirección, sus labios dejando escapar una melodía dulce y hermosa.

“Los pétalos de jazmín son blancos, las salpicaduras de dalia son arcoíris, el rosa no es nada lindo, y la flor lunar es un gran fenómeno pervertido… ¡Ah! ¡Cuñado!”

Ella de repente vio a Yun Che, mientras Pequeña Jazmín lo llamaba y voló alegremente riendo, “Hehe, entonces estás aqu.”

El Reino Darkya era enorme y, sin embargo, siempre se encontraba con ella. Yun Che ya se había acostumbrado. Aunque esta pequeña niña era un enigma, ya era demasiado perezoso para cavar más. Él respondió con una mirada impotente en su rostro, “¿A dónde fuiste corriendo?”

“Hmph, todavía tienes la sinceridad de preguntarme.” Pequeña Jazmín arrugó la nariz y pasó el pulgar sobre ella. “De repente te sentaste allí sin moverte y me ignoraste por tanto tiempo. Por supuesto, decidí irme y jugar sola. Cuando volví, habías desaparecido. ¿Tú… me dejaste a propósito?”

“…” Yun Che se quedó sin palabras por un momento.

“¡Ah! Cuñado, ¿qué es eso en tu mano? Qué bonita luz. Pequeña Jazmín saltó hacia él y levantó su mano. Ella reveló una mirada de decepción, “Es solo una Piedra de Imágenes Profunda, y me pregunté qué tipo de juguete divertido era. Eh… lo tienes en la mano, ¿grabaste algo divertido? ¡Quiero ver! ¡Quiero ver!”

Lei Qianfeng había puesto estas dos Piedras de Imágenes Profundas junto con el Jade Divino de Buda de las Nueve Estrellas. Obviamente contenían algunas grabaciones muy importantes. Yun Che también era bastante curioso, entonces él respondió, “Está bien, está bien, pero primero tienes que prometerme. Lo que sea que veas, absolutamente no debes contarle a nadie más sin mi aprobación previa.”

“Eso es un hecho, las chicas que transmiten tonterías son detestables”, respondió inmediatamente Pequeña Jazmín.

“…” Yun Che inclinó sus labios, insertando una pequeña cantidad de energía profunda en la primera Piedra Profunda de Imágenes.

Una imagen fue proyectada hacia afuera desde el centro de la Piedra de Imágenes Profundas. Yun Che vio la figura de Lei Qianfeng, su esposa oficial Xiao Qingtong estaba con él. En el costado había un joven atractivo que irradiaba un aura de nobleza. Detrás de ese joven había un hombre de mediana edad, frío y duro… Aunque era una imagen de la Piedra de Imagenes Profunda, todavía le daba a Yun Che una sensación pesada y opresiva.

Yun Che alzó las cejas. Vagamente adivinó la identidad de estas dos personas, sin embargo, su conversación lo dejó tambaleándose en estado de shock.

“Oh tío, tío. Con respecto al Espíritu del Bosque Real, mi padre real que rara vez se enoja está furioso en este momento… ”

“¡Guike! Tienes que ayudar a tu tío… ”

“Dejando de lado el tema del Espíritu del Bosque Real, en estos pocos años, sus tributos de Orbes de Espíritus del Bosque y las incubadoras de cultivo se han vuelto cada vez menos…”

………………

Yun Che lo observó solemnemente hasta el final. Sus fruncidas cejas estaban tensas. A medida que las imágenes se desvanecían, mantuvo la Profunda Piedra de las Imágenes firmemente sujeta en su mano. A pesar de que era solo una Piedra de imágenes profundas, de repente parecía decenas de miles de veces más pesada.

Esto se debía a que dentro de esta pequeña Piedra de Imágenes Profundas, se llevaban a cabo las grabaciones, voces que eran más que suficientes para arruinar la reputación del Rey del Reino Marcial Divino, ¡e incluso causarían que sufrieran posibles sanciones!

¡Ese joven en cuestión era sin duda el hijo del Gran Rey del Reino-Wu Guike! Y como Ruyan había mencionado, quien lo acompañó y protegió fue muy probablemente un temible experto en el Reino Soberano Divino. En cuanto a esta grabación, las ondulaciones de los individuos en el interior, la claridad de las imágenes, todos sus gestos, sus miradas y expresiones se registraron con la mayor claridad. Todas las expresiones se captaron perfectamente y sus voces eran fuertes y claras, era como si se grabara a una distancia muy corta. ¿Y este Wu Guike, que tenía a este experto Soberano Divino “Chengyan” a su lado, realmente no se había dado cuenta en absoluto?

¿Cómo logró Lei Qianfeng esto?

“Muy aburrido. Es solo gente extraña diciendo cosas extrañas. No es divertido en absoluto, “gruñó Pequeña Jazmín con una mirada decepcionada en su rostro. Sin embargo, su expresión repentinamente brilló. Ella soltó una risita, “Sin embargo, esa hermana mayor con ese vestido verde se ve muy bonita.”

Con esta Piedra de Imágenes Profundas en mano, siempre y cuando fuera el momento adecuado, ¡no era una exageración decir que ahora tenía un control sobre el Reino Marcial Divino! Y esta fue una retención relativamente importante.

Poder tener un control sobre un reino estelar superior, y todo el camino hasta su Gran Rey del Reino… ¿qué tipo de concepto era este?

Yun Che estaba ahora lleno de curiosidad hacia la siguiente Piedra de Imágenes Profundas, la levantó rápidamente e insertó energía profunda en ella.

Antes de que las imágenes comenzaran a aparecer, sonó la respiración pesada de un hombre y los gritos de placer de una mujer. Luego, apareciendo dentro de la grabación, había una pareja, un hombre y una mujer, que hacían “eso”. La hora era en el medio de la noche y la luz de la luna brillaba en sus rostros, de modo que sus caras podían verse claramente.

¡El hombre, era Wu Guike!

Y esa mujer… ¡En realidad era la esposa oficial de Lei Qianfeng, la tía de Wu Guike, Xiao Qingtong!

Yun Che estaba estupefacto. En un lado de sus oídos estaba la voz de una joven enojada que le gritaba. Pequeña Jazmín cubrió sus ojos y se apartó de un salto, su rostro era de un profundo tono rojo. “Tú… Tú… ¡Eres un tipo malo, un demonio sexual, un superdugido pervertido! Realmente eres tan desagradable. Esto… Este tipo de cosas desagradables… ¡Tu eres tú…! ”

“~! @ # ¥%……” Yun Che apresuradamente guardó la Piedra de Imágenes Profunda y sostuvo sus dos manos en defensa, “Estas no son mis cosas, acabo de recogerlas hace un momento.”

“Tú… No solo hiciste una cosa tan despreciable, sino que también te niegas a admitir tus malas acciones. ¡Realmente eres un gran chico malo!” Gritó Pequeña Jazmín.

Yun Che se encogió de hombros sin poder hacer nada. “Está bien, soy un pervertido super ultra despreciable, así que en el futuro ya no deberías seguirme.”

Cuando terminó, agarró el cadáver de Lei Qianfeng y comenzó a volar.

“¡Oye! ¿A dónde vas? ¡Ah! ¡Esperameí! ” Pequeña Jazmín bajó ambas pequeñas manos de sus ojos mientras corría tras él.

“… ¿Por qué todavía me sigues?”

“¡Hmph! ¿Quién te pidió que fueras mi cuñado? A pesar de que eres un gran pervertido degenerado, aún tengo que reconocerte… wuu… soy tan lamentable.” El rostro de pequeña Jazmín era una imagen de piedad.

Yun Che rodó sus ojos, demasiado perezoso para responder.

Él no verificó el estado de la Secta del Alma. Yun Che trajo el cuerpo de Lei Qianfeng y voló más allá de la Cordillera del Alma Negra, dando vueltas alrededor de la Ciudad Darkya, y llegó al sur de la Ciudad Darkya.

Este era el reino secreto destruido donde la raza Espíritu del Bosque había vivido. También era su lugar de descanso final.

Cuando llegó a esta tierra llena de flores, toda expresión desapareció de la cara de Yun Che. Arrojó a Lei Qianfeng al suelo y luego se arrodilló y cerró los ojos.

Mirando sus acciones, la boca de Pequeña Jazmín se ensanchó. Ella preguntó: “Cuñado, ¿Qué es este lugar? ¿Qué estás haciendo?”

Yun Che bajó la cabeza suavemente y respondió: “Este lugar fue una vez un mundo oculto. Muchos espíritus del bosque vivían seguros en este lugar. Fueron muy amables conmigo, pero no hace mucho, todos murieron por mi culpa.”

“¿Oh?” Pequeña Jazmín parpadeó

Después de un período de silencio, Yun Che abrió los ojos y extendió la mano. Una bola de fuego aterrizó en el cadáver de Lei Qianfeng y comenzó a arder. En un instante las cenizas comenzaron a volar y se desplazaron a todas partes.

“Abue Qing Ye, Senior Qing Mu… Qing He… Fei Yan… Qing Zhu… Les debo a todos ustedes. Además de traerte este malhechor que ha perjudicado a tu raza durante innumerables generaciones y convertirlo en cenizas como consuelo para sus espíritus, nunca podré pagar esta deuda que les debo. A partir de ahora, lo único que puedo hacer, y lo que haré con todas mis fuerzas, es proteger a todos y cada uno de los demás espíritus del bosque que conozca.”

“He Lin, estoy a punto de abandonar el Reino Darkya, pero te prometo que definitivamente voy a encontrar a tu hermana mayor. Juro esto. Tal vez el Reino Misterioso Celestial puede arrojar algo de luz sobre su paradero. Cuando la encuentre, si ella está de acuerdo, la llevare al planeta en el que nací. Allí, estará a salvo y no sufrirá ninguna intimidación.”

Mientras las cenizas de Lei Qianfeng terminaban de dispersarse, el viento se hizo mucho más suave.

Después de observar el silencio por un largo tiempo, Yun Che finalmente se levantó. Pequeña Jazmín dijo: “Cuñado, dijiste justo ahora que querías ir al Reino Misterioso Celestial, ¿es cierto?”

“Por supuesto. Tengo cosas y personas que necesito encontrar. El Reino de Dios es tan vasto, y estoy solo. Quien pueda ayudarme debería estar en el Reino Misterioso Celestial… Espero que ese reino misterioso y secreto no me decepcione.”

“Oh…” La chica tenía una expresión de conflicto en su rostro. Ella apretó su nariz y rápidamente dijo, “Cuñado, creo que sería mejor para ti no ir al Reino Misterioso Celestial. Incluso si vas, no tendrá sentido.”

Yun Che la fulminó con la mirada. “¿Cómo lo sabes?”

“Esto…” Pequeña Jazmín luchó por pensar y después de un rato se rió, “No he pensado en una razón, espera que yo piense en una y luego te repondo, ¿de acuerdo?”

“…” Yun Che entrecerró los ojos y bajó la cabeza, “Niña, todavía tienes que decirme, ¿quién eres y de dónde eres? No importa a donde vaya, siempre puedes localizar con precisión mi ubicación… ¿Quién eres realmente? ¿Cuál es tu motivo para acercarte a mí?”

“Es porque… ¡eres mi benefactor, y también mi cuñado!” Pequeña Jazmín lo miró con sinceridad.

La boca de Yun Che se crispó. “Si fuera a creerte… sería un idiota”.

Él se enderezó y sus ojos se clavaron en los de ella, “Cuando mencioné el Reino Misterioso Celestial, tuviste una expresión extraña en tu rostro. ¿Eres alguien… del Reino Misterioso Celestial?”