viernes, 25 de mayo de 2018

ATG CAP 1101

Capítulo 1101 – Jazmín, Pequeña jazmín

Reino Darkya

Su conciencia volvió lentamente a él.

Cuando Yun Che abrió los ojos, vio una pequeña silueta constituida de color rojo de pie frente a él mirándolo silenciosamente.

Esa carita incomparablemente hermosa tenía un toque de orgullo y frialdad. En ella seguía estando su vestido de hadas rojo ahumado favorito. Su cabello carmesí llegaba a sus caderas, haciéndola parecer suave y delicada.

“Jaz… mín…” susurró Yun Che. Sabía que estaba en un sueño, pero su alma no podía dejar de temblar de emoción.

“Te has vuelto a herir de nuevo. ¿No me digas que es por esa mujer?” Jazmín lo miró, esa mirada y ese tono familiares, y esa fuerte postura de un maestro.

“Hehe…” Yun Che se rió entre dientes. “De hecho fue. Se llama Pequeña Jazmín.”

“Hmmpff!” Jazmín estaba enojada “¿Cuándo aprenderás a atesorar tu vida adecuadamente? Esos años contigo, hice muchos juicios erróneos, pero una cosa en la que definitivamente estoy segura es que si un día estás total y absolutamente muerto, ¡la razón sería por culpa de una mujer!”

“Si es por ti…” Yun Che la miró y respondió decididamente “No lo pensaría”.

“¡Idiota!” Ella lo regañó una vez más y luego se giró, su mirada también lo dejó. “Antes de separarnos, ya te lo había dicho, ya no estamos predestinados y no tenemos más vínculos entre nosotros. Nuestros caminos ya no se cruzarán.”

“Vive bien, no tengas más esperanzas sin sentido, incluso si tiene que ver conmigo.”

Mientras su voz se volvía débil, esa figura de ensueño suya gradualmente se volvió borrosa.

“¡Jazmín… Jazmín! No vayas primero, tengo mucho de qué hablar contigo… ¡¡Jazmín!!”

Yun Che se sentó, el dolor en todo su cuerpo lo sacudió, despertándolo completamente, su línea de visión también lentamente comenzó a aclararse.

Este lugar parecía una cueva naturalmente formada. Había una pequeña fogata hecha sobre pedazos de madera rotos. Una niña vestida con un colorido vestido se sentó frente a él. Sus mejillas y barbilla descansaban sobre sus palmas mientras lo miraba sin parpadear.

“Despertaste rápido, pensé que dormirías por más tiempo.” Las manos de la Pequeña Jazmín aún permanecían en sus posiciones sosteniendo su lindo rostro en el medio. Ella continuó suavemente “Tus heridas son muy serias”.

“¿Cuánto tiempo estuve durmiendo?”

Tenía un terrible dolor de cabeza, se puso la mano en la cabeza durante un buen rato antes de aflojar lentamente su agarre.

La pérdida de mi energía mental es mayor que las lesiones que he sufrido físicamente, probablemente solo pueda recuperarme después de un largo período.

Pequeña Jazmín inclinó su cabeza, recordando “Probablemente alrededor de dos o tres horas. Oh sí, cuñado, constantemente gritabas el nombre de la hermana “Jazmín” en este momento.”

“…” Yun Che se detuvo un momento para respirar y lentamente se sentó derecho, su espalda apoyada contra la pared de piedra. La oscuridad del exterior tenía una débil luz que brillaba a través de ella. Probablemente fue pasada la medianoche “¿Dónde está este lugar? ¿Fuiste tú quien me trajo aquí?”

“Por supuesto que fui yo. Definitivamente no pudieron haber sido esos tipos malos.” Pequeña Jazmín hizo un puchero. “De todos modos, no sé dónde está este lugar, pero definitivamente es muy seguro. No hay nada notable en el entorno. Realmente debes agradecerme, mi querido cuñado, si no hubiera hecho un trabajo tan duro como arrastrar a mi cuñado a este lugar seguro, a estas alturas ya te habrían devorado las bestias profundas.”

“…” Yun Che no habló más, él lenta y constantemente trató de recuperarse, era solo que esa figura roja flotante aún estaba a la vista dentro de su estado de semi-sueño,

“Jazmín…” su conciencia comenzó a desvanecerse una vez más.

Pequeña Jazmín abrió ligeramente los labios, un poco sorprendida por su estado de aturdimiento y rápidamente preguntó: “Cuñado, ¿estás muy enojado conmigo en este momento?”

“…” Yun Che comenzó a despertarse una vez más y miró a Pequeña Jazmín “¿Qué piensas? Olvídate de la última vez. ¡Esta vez casi me mataron por tu culpa!”

“Hehehe.” Pequeña Jazmín sacó su lengua descaradamente “En realidad… En realidad, esta vez, o la última, deje que esas malas personas me descubrieran a propósito. Es porque sé que mi cuñado está a mi lado, si no, nunca podrían encontrarme.”

“¡Tú!” Yun Che violentamente giró su cabeza, mirándola con sus ojos como dagas “No eres tan simple como pareces. ¿Quién diablos eres tú… y por qué intentas hacerme daño?”

“No quiero dañar a mi cuñado. Yo solo…” Las cejas de Pequeña Jazmín comenzaron a curvarse mientras soltaba una risita” Solo quiero ver si mi cuñado está dispuesto a enfrentar cada peligro para venir y salvarme.”

“Argghh!” Yun Che frunció el ceño mientras escupía las siguientes palabras “No tenemos lazos entre nosotros. ¡De dónde viene tu confianza en que te salvaré una y otra vez!”

“Definitivamente es porque soy tan bonita y adorable. Cuñado nunca toleraría que me dañaran si quiera un pelo.”

Yun Che “…”

“Ah, y hay esta otra… muy muy pequeña razón.” Pequeña Jazmín comenzó a hablar en un tono bajo. “Quiero saber si es porque tengo el mismo nombre que la hermana mayor, Jazmín, por eso no me abandonaras… ¡Nunca hubiera pensado que ese cuñado es en verdad tan tonto!”

Era como si cada palabra de Pequeña Jazmín atravesara el punto de muerte de Yun Che.

La razón por la que cada vez… todas y cada una se lanzaba sin precaución hacia el viento y arriesgaba su vida para salvar a esta pequeña niña con la que no tenía ningún vínculo… la gran razón… no… la única razón era porque se llamaba “Pequeña Jazmín”.

Quizás fue una coincidencia. Tal vez en ese momento ella estaba diciendo tonterías. Yun Che, cuyo ser entero estaba preocupado por Jazmín, la Jazmín que había venido a él, sola de los Reinos de Dios… “Pequeña Jazmín” era de hecho un nombre que conmovía su corazón. Quería rechazarla por tener el mismo nombre, le disgustaba que ella llamara obstinadamente a Jazmín “Hermana Mayor Jazmín” y también por llamarlo cuñado…

Sin embargo… sin saberlo, ella había dejado una marca en su corazón.

No podía ignorar esos sentimientos pesados que seguían llegando cada vez que Pequeña Jazmín parecía estar en peligro.

“… No hay más una próxima vez. Y además, no me llames cuñado…” siseó Yun Che.
Su tono era grave y hablar abrió algunas heridas. Yun Che hizo una mueca de dolor, su cuerpo se convulsiono ligeramente.

Inesperadamente, después de este sermoneo de Yun Che, Pequeña Jazmín se comportó de manera obstinada y rebelde. Ella hizo un leve puchero, su cara se veía extremadamente culpable y herida. “Cuñado, ya sé que estoy equivocada. En ese momento, pensé que era divertido, no sabía que sufrirías tanto.”

Extendió su mano, suavemente acercándose a la herida del pecho de Yun Che, aparentemente queriendo tocarla sin atreverse. “¿Es muy doloroso? Prometo que no lo volveré a hacer. Definitivamente no lo haré.”

Mirando su mirada lastimosa y su manera contrita, Yun Che ya no podía desahogar su estómago lleno de indignación e ira. Casualmente y sin poder hacer nada negó con la cabeza “Olvídalo, siempre y cuando sepas que estabas mal…”

Antes de que él hubiera terminado de hablar, los ojos de Pequeña Jazmín se iluminaron mientras ella respondía eufóricamente “Sabía que mi cuñado no se enojaría conmigo. ¡Hehehehe! Cuñado, cuando estabas durmiendo, gritaste el nombre de la hermana mayor Jazmín, docenas de veces. Arriesgarte para salvarme, fue por la hermana mayor Jazmín. ¡Tratas a la hermana mayor Jazmín tan bien, no es de extrañar que estuviera dispuesta a casarse contigo!”

“…” Yun Che respiró suavemente “Como has sido honesta conmigo, también seré honesto contigo sobre esto. Jazmín… en realidad no es mi esposa, es mi maestra.”

“¿Eh?” La boca de la Pequeña Jazmín se ensanchó “¿Maestra? Ah… Eh… Entonces, el cuñado debería ser extremadamente respetuoso con ella, ¿verdad?”

“¿Respetuoso?” Yun Che levantó su cabeza “No lo sé. No sé cuáles son mis sentimientos con respecto a ella. Ella es mi maestra, pero para mí es mucho más que solo una maestra.”

Pequeña Jazmín no interrumpió y lo miro en silencio, sin parpadear.

“Ella me ha enseñado muchas cosas, pero nunca sentí ese tipo de gratitud o respeto que uno tiene hacia un benefactor. Ella me ha salvado innumerables veces. Si no fuera por ella, habría sido un cadáver tendido en el lugar de Dios sabe dónde, pero nunca he tenido ese tipo de agradecimiento que uno tiene hacia el de un salvador… Ella es la única en este mundo que más me ha regañado… ella es la más feroz… sin embargo, nunca me he sentido enojada con ella ni siquiera un poco… de hecho… Cuando sueño… espero verla y escucharla regañarme de nuevo mil veces… no… diez mil veces.”

Sin darme cuenta, todos estos sentimientos comenzaron a derramarse. Debido a Jazmín él vino a los Reinos de Dios. Conoció a innumerables personas, sin embargo, todavía estaba constantemente solo. Tenía que ocultar sus planes por Jazmín en lo profundo de su corazón. Su nombre era el peor tipo de tabú imaginable aquí, no podía hablar de ella, no podía hablar de ella con nadie.

En este momento, no pudo evitar confiar en esta chica llamada “Pequeña Jazmín” que constantemente le gritaba el término “cuñado, cuñado”. Sin saberlo, derramó su corazón y confió en ella.

“Siempre supe que ella y yo veníamos de mundos diferentes, pero nunca hubiera imaginado que nuestra despedida sería tan repentina y tan extrema”.

“Después de que ella se fue, sentí como si la mitad de mí desapareciera de repente. Inicialmente pensé que era porque estaba acostumbrado a confiar en su fuerza y en la sensación de seguridad que me dio, pero más tarde me di cuenta de que era a ella a lo que estaba acostumbrado, a todo lo relacionado con ella. Sin ella, mi vida siempre tendrá una pieza irremplazable faltante.

Pequeña Jazmín abrió la boca “¿Y tú… la estás buscando ahora?”

“Sí”. Yun Che estaba tan fascinado con sus emociones que no se dio cuenta de la extrañeza de la pregunta de Pequeña Jazmín. Él medio murmurando dijo “Nací en los reinos inferiores. Vine a los Reinos de Dios, fue para poder verla de nuevo… No importa qué, tengo que encontrarla, aunque sea para decir adiós correctamente.”

Yun Che cerró los ojos… Si puedo encontrar a Jazmpin… y si es solo para decir adiós, ¿realmente estaré satisfecho?

“Viniste al Reino de Dios, a buscar a la hermana mayor Jazmín… ¿Es esa la única razón?”, Continuó Pequeña Jazmpin.

“Sí” respondió Yun Che sin dudar.

“…” La mirada de la Pequeña Jazmín comenzó a ponerse inquieta. “Entonces, ¿dónde está ella ahora, y cómo vas a buscarla?”

“Sé dónde está… es solo que, ese es un lugar al que nunca puedo ir”. Yun Che soltó una fría risa autocrítica. “Pero, he encontrado una manera de verla una vez más. Es solo que… Debo encontrar dos cosas, y en dos años definitivamente podré verla.”

“¿Oh? ¿Que cosas?”

Una pequeña mano se posó sobre el hombro de Yun Che, comenzando a sacudirlo suavemente. “¡Dilo rápidamente! Es posible que haya oído hablar de ellos antes.”

Yun Che se rió entre dientes “Estos dos elementos, uno se llama Jade de Buda de Nueve Estrellas Divinas ,y el otro se llama Hierba Emperador Inmortal.”

“Jade de Buda de Nueve Estrellas Divinas… Hierba Emperador Inmortal…” Pequeña Jazmín comenzó a repetir estos nombres para sí misma, sus ojos parpadeando constantemente como si tratara de recordar… es como si hubiera oído hablar de ellos… pero aún… ¿No es así?

“Estos son objetos extremadamente raros, no conocerlos es normal”. Yun Che no se sorprendió por la mirada perpleja en la cara de Pequeña Jazmpin y dejó de hablar lentamente. Él comenzó a ser un poco más solemne. Miró el clima afuera, y comenzó a enfocar su espíritu. Él comenzó a canalizar el Gran Camino de Buda “Voy a comenzar mi recuperación, es mejor que no me molestes de nuevo. Descansa un poco, te llevaré lejos de aquí al amanecer.”

“Está bien.” Pequeña Jazmín respondió pareciendo algo distraída.

Después de activar el Gran Camino de Buda, Yun Che rápidamente se calmó, su cuerpo físico y su estado mental comenzaron a recuperarse rápidamente.

“Tales nombres extraños. Parece que el hogar no tiene esos.” Pequeña Jazmín estaba sumida en sus pensamientos. Finalmente, después de mucho tiempo poniendo mucho esfuerzo en pensar sobre este asunto, sus ojos se iluminaron.

“¡Está bien! ¡Puedo preguntarles a esos abuelos del Reino Misterioso Celestial!”

Después de sentirse segura, esta pequeña niña comenzó a animarse nuevamente. Ella inmediatamente comenzó a volar en el aire y en un abrir y cerrar de ojos, desapareció.

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