ATG CAP 1106

Capítulo 1106 – Miembros del Reino Marcial Divino

Este mes fue como un abismo interminable de una pesadilla para la Secta del Alma Negra.

En solo un mes, innumerables de sus mejores y más brillantes discípulos habían muertos. Perdieron a la mitad de sus mayores y todos los hijos de Lei Qianfeng murieron envenenados. Toda la secta era como si las cenizas estuvieran esparcidas por sus rostros. Habían perdido toda su dignidad y reputación, su futuro parecía sombrío. Anoche, el veneno estalló completamente dentro de Lei Qianfeng. Toda la secta estaba asegurada y la atmósfera era extremadamente pesada.

Todo esto fue gracias a una persona.

El nombre “Ling Yun” era como la marca de un demonio, marcada profundamente en la conciencia de todos y cada uno de los miembros de la Secta del Alma. Cada vez que pensaban en este nombre, no podían evitar estremecerse.

Hoy, el clima fue absolutamente encantador. Yun Che lentamente abrió sus ojos. Desde que comenzó a involucrar a la Secta del Alma en esa ida y vuelta, había descuidado su entrenamiento regular. Después de forzar a Lei Qianfeng a su muerte, antes debería abandonar el Reino Darkya para ir en busca del Jade de Buda de las Nueve Estrellas Divinas y la Hierba Emperador Inmortal. Tendría que usar toda su fuerza para entrenar también.

La fecha de la Convención del Dios Profundo se acercaba cada vez más.

Se levantó y miró en dirección a la Secta del Alma. Sus labios se curvaron en una fría sonrisa. Era hora de meterse con Lei Qianfeng una vez más.

La fuerza profunda de Lei Qianfeng estalló repentinamente la noche anterior y perdió el control de sí mismo gritando y gimiendo antes de colapsar. Esto fue el resultado del envenenamiento y fue, naturalmente, lo que Yun Che quería ver más. Todo estuvo dentro de sus cálculos.

Esto no era una cuestión de si la tolerancia de Lei Qianfeng era débil. Fue gracias a las constantes derrotas, insultos, la muerte de sus hijos y finalmente él mismo envenenado; y luego las noticias de todo el asunto se transmitieron al público… y mucho menos a Lei Qianfeng, incluso un buda viviente moriría por la ira.

Aunque los medios de Yun Che eran despréciales, él no era más que un hombre. Su fuerza profunda estaba en el Reino del Alma Divina. Contra la gran Secta del Alma, solo podía expresar su ira por esos medios. Aunque sus medios eran así, era el único que podía hacerlo. Era correcto decir que el estado de Lei Qianfeng fue causado completamente por él.

Yun Che se elevó en el aire y aceleró en la dirección hacia la Secta del Alma. Después de la noche anterior, el veneno del antiguo dragón cornudo en Lei Qianfeng se había inflamado en gran medida. En unos dos o tres días más, si Lei Qianfeng no podía concentrarse por completo en la supresión del veneno, el veneno eventualmente seguiría su curso y moriría sin lugar a dudas.

Después de entrar a la Cordillera del Alma Negra, Yun Che comenzó a bajar. Pasó por el área este de la cordillera antes de disminuir la velocidad.

La cordillera de hoy no era tan silenciosa como antes. Toda clase de rugidos de bestias profundas sonaron desde cada rincón del rango mientras el halcón volaba ocasionalmente en el cielo. Las cejas de Yun Che se fruncieron… ¿No había discípulos de la Secta del Alma que protegieran la montaña hoy?

A menos que… El estallido de ayer… ¿Lei Tianfeng ya iba a morir? No puede ser… ¿verdad…?

Sin bajar la guardia, Yun Che continuó adelante. En camino, no encontró ninguna presencia o aura de discípulos de la Secta del Alma. Miró en dirección a la Secta del Alma. Sus cejas se crisparon violentamente siguiendo su línea de visión y se detuvo.

Este tipo de sentimiento…

Justo cuando estaba mirando en dirección a la Secta del Alma, sintió una fuerte sensación de peligro golpearlo, desapareció tan pronto como se detuvo. Una misteriosa sensación de inquietud comenzó a rumiar dentro de él.

Yun Che frunció el ceño… cada vez que se acercaba a la Secta del Alma, siempre estaría rodeado de peligro. Si fuera un poco descuidado, habría muerto nueve veces, pero esta vez, la sensación que tenía era aún más fuerte que la última vez. Era como si el oponente fuera invencible e insondable. Si continuaba acercándose, parecía como si enfrentara una tribulación invencible.

Yun Che no se atrevió a adivinar la advertencia que venía de su espíritu. Se detuvo, ambos ojos paralizados en dirección a la Secta del Alma, sin moverse durante un buen rato.

Lei Qianfeng ya había sido empujado al borde la noche anterior, con solo un pequeño empujón, definitivamente caería en el abismo de la muerte.

Justo cuando estaba sintiendo sospechas, de repente sintió un estallido de energía profunda. Levantó su jade de transmisión y escuchó la voz aterrada de Ji Ruyan en el otro extremo.

“Señor Ling Yun, ¿dónde estás ahora? ¡No te acerques a la Secta del Alma sin importar que! ¡Un increíble pez gordo llegó a la Secta del Alma anoche!”

Yun Che “…”

“Aunque todavía tenemos que confirmar quién es, pero en función de los movimientos de la Secta del Alma, ¡es muy posible que sea alguien del Reino Marcial Divino! El señor Ling Yun no debe acercarse a la Secta del Alma. Sería mejor si cambias tus características y te mantienes lo más lejos posible… O podrías venir al Gremio Mercantil Pluma Negra por el momento. La Secta del Alma nunca sospechó que tuviéramos ninguna relación, este lugar debería ser más seguro. Llegaremos a investigar quién ha llegado esa persona.”

“…” La cara de Ling Yun se puso solemne, después de un breve período de reflexión, retrocedió unos pasos, se dio la vuelta y se fue.

Esa repentina sensación de peligro que sentía no carecía de razón.

El Reino Divino Marcial… Eran personas de los Reinos Estelares Superiores, existencias que definitivamente no podía permitirse ofender.

Yun Che abandonó la Cordillera del Alma Negra, poco después de llegar a la Ciudad Darkya y entrar en el Gremio Mercantil Pluma Negra.

“¡Señor Ling Yun!”

Ling Yun acababa de llegar. Una chica con un vestido morado corrió apresuradamente. Era encantadora y elegante, sus modales y su postura eran hermosos y sus ojos irradiaban un suave brillo. Su largo cabello era como las nubes, en una banda de color púrpura. Parecía nobleza. Era Ji Ruyan.

Aunque hablaban constantemente, Yun Che no la había visto durante este período.

Ji Ruyan no estaba solo. A su lado había un familiar de mediana edad… ¡Era el Sr. Ji a quien había conocido la primera vez que ingresó al Gremio Mercantil Pluma Negra!

También era el padre de Ji Ruyan, el que ocupaba el puesto más alto en el Gremio Mercantil Pluma Negra.

Su comportamiento era diferente de la fría impresión inicial que Yun Che tenía de él. Cuando vio a Yun Che, el Señor Ji caminó firmemente hacia él paso a paso, su cara incapaz de ocultar su emoción. Luego, respetuoso, se arrodilló. “Señor Ling, no puedo pagarle por todo lo que ha hecho por el Gremio Mercantil Pluma Negra. Por favor acepta este humilde saludo mío.”

La expresión de Yun Che no cambió “Señor Ji, no tiene que hacer esto. He tratado con la Secta del Alma ya que tengo una venganza personal contra ellos, no tiene nada que ver con el Gremio Mercantil Pluma Negra. En cambio, se podría decir que la Señorita Ruyan me ha ayudado aún más. Y a partir de ahora, he utilizado todos los medios posibles para mí. Si la Secta del Alma aún no se derrumba, tu Gremio en el futuro aún estará bajo el control de la Secta del Alma.”

“No.” El Sr. Ji negó con la cabeza “La Pluma Negra es un gran negocio familiar, pero cayó en las garras de la Secta del Alma. Todos estos años, nunca he dormido profundamente, mi corazón estaba en constante confusión sin embargo estaba absolutamente indefenso. Dejando de lado todo lo demás, lo que hiciste nos ayudó a desahogarnos. Esto es suficiente para que nos dure toda la vida.”

“No solo eso” Ji Ruyan sonrió ligeramente “La Secta del Alma ha perdido toda su reputación. Después de perder a todos sus hijos, Lei Qianfeng ya no tiene un heredero. Después de Lei Qianfeng, la Secta del Alma ya no tendrá relaciones con el Reino Marcial Divino en lo que respecta a las relaciones maternas. Habrá caos dentro de la secta una vez que se trata de una lucha por el poder. Quizás en ese momento es cuando el Gremio Mercantil Pluma Negra finalmente podrá escapar de su jaula. Y a pesar de todo esto, es gracias al Señor Ling Yun.”

El Señor Ji mantuvo sus ojos en Yun Che, no pudo evitar suspirar. “Señor Ling Yun, está completamente solo, pero ha logrado llevar a la Secta del Alma que es una superpotencia de rodillas. Si no lo viera con mis propios ojos y lo escuchara con mis propios oídos, tal vez incluso en mis sueños, no me atrevería a creerlo. Ruyan dijo que naciste en los Reinos Inferiores, pero eres el hombre más espectacular de la generación más joven que he visto. Nadie puede compararse con usted, señor Ling Yun.”

Ling Yun se rió entre dientes: “Señor Ji, estás exagerando.”

“Señor Ling Yun, noticias sobre la Secta del Alma han llegado.” La cara de Ji Ruyan se puso seria. “De hecho, son personas del Reino Marcial Divino. Deberían haber llegado a la Secta del Alma anoche, si nuestras fuentes no están equivocadas, hay dos de ellos.”

“¿Solo dos de ellos?” Yun Che alzó las cejas.

“Señor Ling Yun, no debe tomar esto a la ligera. Estos dos no son como los mensajeros habituales que provienen del Reino Marcial Divino… En realidad, es Wu Guike.

“¿Wu Guike?” Yun Che recordó algo.

Hace un mes, Ji Ruyan había mencionado este nombre. ¡Wu Guike era el hijo del Gran Rey del Reino Marcial Divino! Él era el hijo del Gran Rey del Reino Wu Sanzun y la hermana de Lei Qianfeng, Lei Qianyu. Inicialmente se suponía que tenía un estatus ordinario, ya que estaba a cargo de una concubina humilde, sin embargo, su crecimiento fue exponencial y su talento impactante. Su posición creció a pasos agigantados en el Reino Marcial Divino.

Era el sobrino de Lei Qianfeng, al mismo tiempo que era el mayor patrocinador de la Secta del Alma Negra.

El hijo de un Gran Rey del Reino de un Reino Superior… Solo este tatuaje fue suficiente para asustar a cualquiera en todo el Reino Darkya en sumisión.

“El talento de Wu Guike fue monstruoso. Después de mostrar su talento y recibir el reconocimiento y guía personal de Wu Sanzun; solo tenía treinta años de edad, pero estaba asombrosamente en el Reino Espíritu Divino. Durante la Convención Dios Profundo, mando a volar fácilmente a todos. Además, al ser el príncipe del Reino Marcial Divino, era seguro que su guardaespaldas sería una existencia aterradora. Muy probablemente un Maestro Divino.

“…” Yun Che se quedó sin palabras por bastante tiempo.

El reino de la Tribulación Divina era su mayor objetivo en este momento… pero este Wu Guike, que apenas tenía diez años más que él, ya había ingresado en el Reino Espíritu Divino.

Esto fue lo más aterrador sobre los Reinos Estelares Superiores.

Solo había otra persona que lo acompañaba, y si fuera un experto del Reino Maestro Divino que estuviera en el mismo nivel que Mu Bingyun… ¡tratar de acercarse a la Secta del Alma una vez más sería un simple suicidio!

Si hubiera un experto en el Reino Maestro Divino ayudando, el veneno en el cuerpo de Lei Qianfeng muy probablemente sería desintoxicado en cuestión de días.

“Señor Lingyun, no debe acercarse a la Secta del Alma. Puedes quedarte aquí durante este período de tiempo. Una vez que los dos se vayan y nos enteremos, haremos los arreglos para enviarte al Reino Misterioso Celestial.” Ji Ruyan continuó con la mayor sinceridad. “Eres el benefactor de nuestro Gremio Mercantil Pluma Negra. Definitivamente no te haremos daño. Si tiene alguna solicitud para nosotros, haremos el mayor esfuerzo para cumplirla.”

“…” Yun Che respiró profundamente. Pensando en cómo tuvo que idear tantos planes, tomando grandes riesgos en cada paso del camino solo para envenenar a Lei Qianfeng… y ahora todos sus esfuerzos se desperdiciarían, se sentía extremadamente desconcertado en este momento.

“Está bien.” Yun Che dejó escapar un profundo suspiro “Tendré que molestarlos a todos ustedes. Ahora mismo necesitaré un lugar tranquilo para cultivar.”

La atmósfera en la Secta del Alma Negra era muy pesada.

Todo estaba tranquilo en la secta. Los discípulos estaban en sus posiciones de guardia. Los maestros de salón y los ancianos estaban todos al frente, inclinándose, sus expresiones de miedo. Todos los maestros de las sectas ramas también habían llegado, de pie en sus posiciones después de apresurarse durante toda la noche.

Obviamente estaban dentro de las cuatro paredes de su propia secta, pero de los discípulos a los ancianos, a todos les resultaba difícil respirar y nadie se atrevía a pronunciar una sola palabra. Sus expresiones de miedo los hacían parecer como si estuvieran dando la bienvenida a un dios en su mundo.

Lei Qianfeng estaba sentado en el salón principal, su fuerza profunda estaba en un lío. Detrás de él había un hombre de mediana edad vestido de negro con una expresión helada. Su palma estaba firmemente presionada contra la espalda de Lei Qianfeng. Esta escena ya había estado ocurriendo durante unas horas.

Finalmente, Lei Qianfeng abrió los ojos y con un “¡Warrghh!” Escupió una gran bocanada de sangre. A medida que la sangre salpicaba y aterrizaba, derritió las piedras profundas debajo de ella.

Lei Qianfeng cayó al suelo, tomando profundas bocanadas de aire. Cuando la sangre salió de su boca, su complexión se volvió mucho mejor. Se levantó rápido y le hizo una profunda reverencia al hombre de mediana edad vestido de negro, dándole las gracias con reverencia. “Yo Lei Qianfeng nunca olvidare la gracia salvadora de Wu Zunze.”

El hombre a quien respetuosamente Lei Qianfeng saludó como “Wu Zunze” ni siquiera se molestó en mirarlo, frunció el ceño y dijo “Qué poderoso veneno. Afortunadamente, la cantidad era minúscula y el período de tiempo fue corto, de lo contrario, incluso un Gran Firmamento de Dios no podría salvarte.”

“Entonces, ¿estás diciendo que todo está bien ahora?” Una voz suave y relajada viajó lentamente.

En la ventana, un joven con las manos a la espalda tenía la espalda hacia ellos. Estaba vestido de blanco con estampados azules. Su cabello llegó a su cintura. Aunque uno no podía ver su rostro, tenía un aire de nobleza a su alrededor que de alguna manera hacía que uno solo se atreviera a mirar su sombra y no directamente a él.

El hombre de mediana edad vestido de negro se volvió “Joven Maestro, aunque el veneno dentro del Maestro de Secta Lei es muy poderoso. Aunque parece estar bien ahora, pero para desintoxicarlo por completo, necesitamos unos cuantos días más.”

“¿Ah?” La voz del joven reveló un rastro de asombro. Lánguidamente se dio la vuelta, revelando hermosas facciones. Su cara era como si estuviera tallada en jade. “Tío, parece que vine en el momento correcto. Si hubiéramos llegado unos días después, me temo que estaría aquí para ver su cuerpo.”